Primera cita
Aunque un sábado por la noche pueda parecer lo contrario, el alcohol no es tu amigo. Unas copas de más pueden provocar que no sigas ni un solo de los consejos que te hemos dado y como consecuencia… el fracaso.
Sus efectos te incitarán a hacer preguntas que no debes, estarás excesivo en todos tus actos y lo peor de todo es que puedes amanecer en una casa que no es la tuya con un chico a tu lado sacado de una peli de terror.
A pesar de que puedas vivir algún que otro fracaso no pierdas la esperanza en encontrar a esa persona especial. ¡Ánimo!.
Si hace unos días os dábamos unos consejos prácticos sobre cómo hacer un buen perfil para aumentar las visitas y poder conocer más gente en Contactos Chueca, ahora os damos las claves para acudir a esa primera cita con garantías de éxito.
Qué ropa llevar, dónde quedar, qué decir y qué callarse son elementos claves para una primera cita.
Si tienes perspectivas de quedar con alguien no dejes esta oportunidad para informarte sobre lo que hay que hacer esa primera vez; y si aún no has conocido a la persona idónea vuelve a los Contactos de chueca, porque nunca se sabe donde estará tu media naranja.
La primera duda que surge cuando tienes una cita es elegir el lugar adecuado para el ‘encontronazo’. Opta por lugares públicos que no lleven a confusiones, por ejemplo: una cafetería. Es un buen lugar para mantener una conversación y saber si la persona que tienes enfrente es un encefalograma plano o resulta interesante.
Evita lugares como cines o restaurantes; el cine porque de poco podréis hablar, aunque si busca la oscuridad puede estar bien, y el restaurante, olvídalo, corres el riesgo de que no te guste y además tengas que pagar la cuenta.
Lo más importante es que seas tú mismo, es decir, que te vistas como habitualmente lo sueles hacer porque así ganarás en seguridad. Si intentas aparentar algo que no eres puedes resultar algo artificial y estarás incómodo en toda la cita. En cualquier caso, es aconsejable optar por la sencillez. No se trata de echar para atrás a primera vista.
Si te va lo de ir a la última, echa un vistazo a la moda primavera- verano 2010 y elíge modelo.
La puntualidad española brilla por su ausencia pero en ocasiones hay que hacer un esfuerzo. Lo que se pretende es dar una buena impresión y llegando diez minutos tarde a tu primera cita no lo conseguirás.
Tampoco es aconsejable llegar con mucha antelación; primero, para no parecer que estás ansioso por el encuentro y, segundo, porque aumentarán tus nervios antes de saber quién es él.
Recuerda: se puntual porque ni eres la novia, ni es el día de tu boda.
Es importante no dejar volar demasiado la imaginación, sobre todo, porque cuando uno vuela alto la caída suele ser dolorosa.
La mejor actitud para una primera cita es no esperar nada, así todo lo bueno que venga lo apreciarás mucho más y si no ves nada positivo te quedarás como al principio.
La química entre dos personas no tarda mucho en aparecer así que si después de veinte minutos no corre nada por tu estómago vuelve a casa en busca de otro perfil.
Es un truco tan antiguo como práctico. Cuando quedes con alguien que nunca has visto en persona recuerda a un amigo que te llame quince minutos después del encuentro para saber cómo va el encuentro.
Si la química empieza a hacer su trabajo continúa la cita, si ves que en vez de pólvora hay chamusquina tendrás la excusa perfecta para escapar.
La trivialidad está a la orden del día, pero en las primeras citas lo mejor es comenzar con conversaciones frescas, poco comprometidas en las que, poco a poco, se va conociendo a la otra persona sin abusar de las preguntas directas.
Hay dos temas que habrá que evitar si no quieres espantar a tu chico ‘web’: uno, no preguntes sobre sus ex, y claro está, tú tampoco hables de los tuyos; el segundo tema tabú: evita contar penas porque el objetivo es pasarlo bien. Tus problemas no le interesan.
La clave del éxito es ser uno mismo porque si le gustas a alguien debe ser con todas las consecuencias.
Antes de la cita, durante el chateo, intenta no escribir que eres alto, moreno, fibrado y con ojos verdes, porque si esta descripción no coincide con la realidad tu cita no tardará mucho en darse cuenta y tus opciones de llegar a mayores serán mínimas. Pero si eres de los que se inventan una vida ficticia darás mucho que pensar y desconfiar a la otra persona, ya que muy pobre debe ser la tuya para inventar otra vida, ¿no crees?.