La historia del tatuaje: una tradición tan antigua como el hombre
Hoy en día, ¿quién no tiene un tatuaje? Estamos lejos de los años en los que las personas tatuadas acarreaban un estigma, aunque obviamente, comprobarás que la respuesta a la pregunta de si son o no atractivos los tatuajes depende en gran medida a quien se lo preguntes.
El tatuaje se trata de una tradición con un pasado relacionado con los primeros hombres.
No es posible datar el origen de la práctica del tatuaje, pero podemos remontarnos a la evidencia arqueológica más antigua que se ha encontrado: Ötzy.
Ötzy es aquel señor cazador del Neolítico que le dio un pequeño susto a dos alpinistas que recorrían un glaciar entre Austria e Italia en 1991.
Esta momia (“por si se puede decir de esta manera”) tiene más de 5,300 años y su estado de congelación permitía apreciar las marcas de tatuajes que lucía en la espalda y las rodillas.
La práctica del tatuaje ha sido común en grandes civilizaciones antiguas, el ejemplo más reseñable es el de Egipto, una civilización en la que la belleza y la higiene eran toda una obsesión, y sin embargo hay evidencias de que su realeza lucía tatuajes desde la XI dinastía.
Hubo un momento en el que el tatuaje cayó en desgracia, es cierto. Empezó a acarrear un estigma negativo.
En Japón se convirtió en una forma de marcar a los criminales, también en el Imperio Romano, donde se imponían también a los esclavos, hasta que el emperador Constantino acabó por prohibirlos.
Ya no volveríamos a verlos en Occidente hasta el siglo XVIII, cuando los expedicionarios ingleses que volvían de la Polinesia, donde los tatuajes aún eran un noble significante de estatus social, aprendieron las técnicas y montaron sus puestos en los puertos de la costa, lo que explica el cliché del marinero.
Pero allí no quedó la historia del tatuaje, porque el punk nos los devolvió, haciendo que este saltara a la vista de todos, metiéndose en la mente de muchos.
Ya sólo era cuestión de esperar a que, como toda apuesta estética contracultural, fuera censurada, perdiese su valor, y decirse que no va con las costumbres.
Pero debido a grandes actores, futbolistas y cantantes que elevaron el tatuaje de nuevo, este se hizo de nuevo con la gloria de un otrora y su popularización llegó para extenderse por un largo tiempo en la historia.
Y a ti, ¿cómo te gusta más tu hombre? ¿Con tatuajes o sin tatuajes?