Los dos grandes triunfadores musicales de los últimos meses han decidido unir fuerzas por una buena causa. Sam Smith se ha erigido como el nuevo fenómeno de la industria musical: arrasa en la última edición de los Grammy, se encarga de empoderar al colectivo LGTB en sus entrevistas y se dedica a pintar con elegancia musical cada tema que toca.
Por su parte, John Legend se convirtió en el vencedor musical de los Óscar alzando la estatuilla a la Mejor Canción y con una interpretación de ‘Glory’ que consiguió que hasta las sillas del Teatro Kodak llorasen ante tanta emoción.
Ahora ambos artistas han reinterpretado la canción con fines benéficos para la organización Comic Relief, que pretende ayudar a mejorar la vida de las personas más vulnerables en el Reino Unido y África.