Rodeada de sus allegados
Jamesetta Hawkings fallecía en el Riverside Community Hospital de Los Ángeles, rodeada de su esposo y de sus hijos, tras ser ingresada en estado terminal el pasado 23 de diciembre. Etta, que además padecía de alzheimer y fallo renal, moría sólo un día después que su descubridor, Johnny Otis.
Miss Peaches -su apodo en la juventud- se había retirado de los escenarios en 2009 y vivía en Riverside desde hace dos décadas. Por ello, sus seguidores de la ciudad de California colocaron flores en su memoria encima de la estrella del Paseo de la Fama de Hollywood que lleva su nombre.
Los artistas de la canción lloran su pérdida
Desde que se ha hecho pública su muerte, multitud de rostros de la música han querido homenajear a la vocalista y dar el pésame a sus familiares, sobre todo desde diversas redes sociales.
Así, Beyoncé, que interpretó a Etta James en la película ‘Cadillac Records’ -y con la que sufrió algún encontronazo tras popularizar una versión de ‘At Last’ que llegó a cantar hasta en la investidura de Barack Obama- dijo: ‘Es una pérdida enorme: Era una de las grandes vocalistas de nuestro tiempo’.
La siempre intensa Lady GaGa no quiso hacer ninguna declaración más allá de la botella de Brandy que iba a dedicar a la cantante esa misma noche. Por otro lado, Katy Perry se despedía de ella llamándola con cariño ‘pájaro cantor’
Una vida tan dura como exitosa
Etta James nació en Los Angeles cuando su madre tenía catorce años. A su padre nunca lo conoció -y con mucha seguridad pudo tratarse de un violador blanco-. La infancia la pasó cuidada por los servicios sociales, y a los cinco años comenzó a asistir a clases de canto a través de una iglesia local. Debutó con la misma edad con la que su madre la dio a luz.
La cantante se hizo un nombre en el mundo de la música, primero en el conjunto Peaches junto a Johnny Otis, más tarde en solitario. Durante las décadas de los cincuenta y los sesenta llegó al estrellato tras popularizar temas como ‘At Last’, ‘Rather Go Blind’ o ‘Something got a Hold of Me’.
Etta James – ‘Something Got a Hold On Me’
Las décadas posteriores fueron bastante tumultuosas a consecuencia de la decadencia de su sello discográfico, de las malas compañías y de lo problemas derivados del abuso de las drogas, que acabaron convirtiéndola en heroinómana.
No obstnate, Etta James fue incluida en el Hall of Fame of Rock & Roll en 1994 y ganó diecisite premios Blues Music y cuatro Grammy, uno de ellos dedicado a toda su carrera. Tras su fallecimiento se abre un polémico problema familiar por su patrimonio, que se estima superior al millón de dólares.