LAS VERSIONES MUSICALES MÁS PATÉTICAS

Cada vez son más los artistas, los populares y los no tanto, que se consideran lo suficientemente capaces como para atreverse con una versión personalizada de alguna de las canciones más conocidas. Ya sean clásicas o más modernas.

Sin embargo, por más que se empeñen y por mucho que lo deseen, hay algunos que bien podrían conformarse con cantar sus propias canciones, sin salirse de sus habituales registros y melodías, y evitarse el bochorno de la tormenta de duras críticas por hacer de una buena canción, un trapito de usar y tirar.

Marta Sánchez, Celine Dion, Shakira o Coldplay son algunos de los artistas que se han atrevido a versionar sin demasiado éxito algunos de los grandes hits musicales.

Querer contribuir con tu granito de arena a tragedias como las de Haití es un acto muy loable en muchos artistas. Y por ello, Marta Sánchez se merece su minuto de gloria pública. Pero querer hacerlo versionando uno de los grandes clásicos como ‘The Rhythm Of The Night’ , en una discoteca abarrotada de gente y donde nadie te hace caso ya no lo es tanto.

Que Marta Sánchez tiene buen voz, nadie lo niega. No todos los artistas saben chillar como ella. Pero debería habérselo pensado dos veces antes de arrancarse (y no por bulerías) a convertir todo un clásico como es ésta canción en la versión dance y discotequera de algunas de sus pastelosas canciones como ‘Colgando en tus manos’.

Tanto una como otra están consideradas como dos grandes de la música. La primera por su intenso registro musical, uno de los más altos, y la segunda por poseer una escalofriante voz negra en un cuerpo de blanca. Sin embargo, y a pesar de los divas que son, ha quedado demostrado que versionar el clásico de AC/DC, ‘You Shook Me All Night Long’, se les queda bastante grande.

A veces vale más un poco menos de voz y algo más de salero y desparpajo sobre el escenario si lo que quieres es bordar una buena canción de rock.

Haber hecho de canciones como ‘Parachutes’ ‘X &Y’ o ‘Clocks’ grandes éxitos musicales de los últimos tiempos no justifica que Coldplay se atreva a versionar una de las canciones más cañeras de Kyle Minogue.

Resulta totalmente incomprensible para nuestros oídos que ese ‘Can’t get you out of my head’ capaz de sacar el mejor bailarín que todos llevamos dentro cada fin de semana, se convierta en una versión melódica y relajante a ritmo de un piano, capaz de dormir a cualquiera.

Presentarse a un concurso como el ‘Factor X’ británico todo el mundo puede. Pero ser bueno y acabar seleccionado ya es otro cantar. Y si no que se lo digan a estos dos galácticos gemelos que de tanto como personalizan la exitosa canción de Britney Spears, ‘Oops… I did it again’, en un intento fallido de quedarse con el público, la convierten en una versión totalmente desconocida y sobre todo, totalmente inaguantable para quien la escuche.

Saber mover las caderas como nadie y despertar el instinto sexual de sus fans con tanta escasez de ropas en cada uno de sus vídeos no hacen de Shakira una fiel merecedora de versionar un clásico como ‘Black in Black’ de AC/DC.

Demostrado queda que tanto grito y contorsionismo es totalmente incompatible con el rock más clásico e histórico.