El próximo lunes conmemoramos la Jornada Mundial de Lucha contrea el Sida, en la que se pretende concienciar a la sociedad de la importancia de mantener una actitud responsable frente a la epidemia y derribar las barreras que las serofobia levanta delante de las personas que viven con el virus.
Con motivo de estra fecha UGT, CCOO y las organizaciones CESIDA, FELGTB y Federación Trabajando en Positivo han instado al Gobierno a través de un manifiesto a comprometerse con la Recomendación de la OIT sobre el VIH y el sida y el mundo del trabajo, promoviendo un pacto social dirigido a defender la igualdad de oportunidades en el acceso y mantenimiento del empleo de las personas con VIH.
Para las entidades firmantes, el citado compromiso es imprescindible para actuar sobre las principales causas que colocan a las personas con VIH en un dramático nivel de desempleo en nuestro país -en torno al 50%-, como son el rechazo sistemático y la discriminación de éstas en el ámbito laboral, tanto en el público como el privado:
- En el ámbito público, el manifiesto señala que las personas con VIH ven limitado su acceso a oposiciones, empleos públicos u otro tipo de trabajos mediante la utilización de una normativa que no garantiza sus derechos, sirviendo como ejemplo el acceso a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado e Instituciones Penitenciarias.
- Respecto al ámbito privado se hace hincapié en que los prejuicios y la desinformación existentes sobre la infección suponen, en muchas ocasiones, la exclusión de las personas con VIH en profesiones vinculadas a la atención a clientes.
¿Qué proponen?
Con el objetivo de ofrecer soluciones a esta situación de discriminación, desempleo y rechazo, las asociaciones han suscrito un acuerdo para crear una Comisión de Trabajo, compuesta por una persona de cada organización, que se reunirá trimestralmente.
En sus propias palabras, la comisión pretende ‘reflejar el compromiso de cada una de las organizaciones con la defensa de los derechos fundamentales de las personas con VIH y sida, y permitirá intercambiar propuestas y organizar actuaciones para luchar contra la exclusión socio-laboral con el fin de contribuir a un mundo más igualitario”.
Asimismo, las entidades han suscrito que el elevado nivel de desempleo entre las personas con VIH no es una cuestión aislada, sino que se enmarca en un contexto caracterizado por los efectos de las políticas de austeridad extrema llevadas a cabo durante los últimos tres años, que han provocado, en términos generales, ‘una mayor pobreza, exclusión y fragmentación de la sociedad española’.
En el mismo sentido, a nivel de empleo, la reforma laboral ha convertido los despidos y la reducción de derechos, de condiciones laborales y de en una constante de nuestro país, algo que ha tenido repercusiones específicas sobre la las personas con VIH, así como sobre cualquiera que padezca una enfermedad crónica, ya que en estos momentos cualquier trabajador o trabajadora puede ser despedida por el hecho de faltar a su puesto de trabajo, aun cuando sea por una baja médica.
Por todo ello, han exigido la retirada de la reforma laboral y que se favorezca un cambio de las políticas públicas, del modelo productivo y del patrón de crecimiento que genere empleo cualificado, digno, estable y de calidad, en lugar de cebarse con los colectivos más vulnerables.