Dani Mateo nos salva del infierno con sonoras carcajadas

Ficha técnica
PK 2.0 que dios nos pille confesados

Dirección: Dani Mateo 
Interpretación: Dani Mateo
¿Dónde?: Teatro Alcázar Cofidis
¿Cuándo?: Viernes 18 de octubre, 22 de noviembre y 6 de diciembre 23:00 horas 
Temporada: Segunda

¿De qué va?

Dani Mateo arranca en el Teatro Alcázar Cofidis la segunda temporada de ‘PK2.0 que dios nos pille confesados’. En su reestreno ante una sala abarrotada y con cómicos de primer nivel como Julián Rodríguez y Luis Piedrahita, el presentador catalán demostró que es uno de los cómicos españoles que mejor se ha adaptado a la moda de los monólogos.

Desde sus tiempos como presentador de ‘La noche sin tregua’, Dani Mateo ha demostrado ser un todoterreno. Lo mismo presenta, que pone su voz a un doblaje de cine o llena de carcajadas un teatro gracias a sus divertidos monólogos (y seguro que con un vaso de arroz y dos tajadas de pollo te hace una paella)…vamos, es una rara avis dentro del panorama cómico nacional, es lo que vendría a ser un auténtico showman, en el sentido americano de la palabra.

El espectáculo que vuelve a llevar a Dani Mateo a Madrid tiene en la religión su tema central, eso sí, nada de ponerse la sotana o de lucir rosario o crucifijos, puesto que aquí el cómico ofrece una particular y divertida visión de las religiones, mandamientos y pecados capitales desde un punto de vista…bastante blasfemo.

Sin embargo no solo de religión vive la función. El catalán se encarga de lanzar pildoras de actualidad desde un punto de vista ácido, corrosivo. De este modo, no faltan menciones a los políticos de pandereta que tenemos en nuestro país (en este caso el PP no se lleva todas las críticas -la mayoría- puesto que Rubalcaba y el PSOE también reciben unos buenos tirones de orejas cuando se habla de corrupción), a la cultura (o falta de ella) de nuestros futbolistas, los efectos de las drogas…o simples anécdotas de su vida (impagable la letra de la canción de rap que compuso siendo un adolescente).

Un humor personal

En el monólogo, Dani Mateo pronto deja claro que lo suyo no es el llamado humor inteligente. Ni mucho menos, el cómico catalán consigue, por decirlo de algún modo, españolizar el tradicional talk-show norteamericano para adaptarlo a nuestro particular sentido del humor.

Así, el cómico se convierte en una suerte de trovador moderno, de contador de historias, aunque aquí cada anécdota no tiene fines didácticos y sí humorísticos.

Primero nos indica que la crisis está a punto de terminar, pero no porque en el horizonte se encuentre una recuperación económica o una salida al empleo, sino porque el mundo está a punto de terminar. 

Posteriormente saca punta de las tres religiones más importantes. Budismo, islam y catolicismo se convierten en el blanco de los envenenados dardos de Dani Mateo.

Para terminar con no uno sino siete monólogos pensados para los lujuriosos, los avariciosos, los zampones, los envidiosos, los irascibles, los perezosos y los soberbios. 

En definitiva, hay que decir que Dani Mateo hace gala de un humor muy nuestro, un humor gestual, visual y con la suficiente inteligencia como para saber reirse de nuestras peculiaridades. Todo para conseguir cuadrar un espectáculo con altas dosis de ironía y crítica social, en el que además Dani Mateo ejerce como confesor y consigue expiar todos nuestros pecados…¡¡y todo por una simple entrada!!