Brian Atwood juega a reinventar el homoerotismo en su nueva campaña
El mundo de la publicidad sigue abriéndose al colectivo LGTB. Hemos asistido a un despegue tan brutal del márketing en clave diversa que más que contar los avances por lustros o años sería mucho más acertado analizar este universo tan cambiante con periodos de tiempo más ágiles.
El mundo de la publicidad se ha acercado a la comunidad recientemente desde diferentes ángulos. Los anuncios de Coca Cola apuestan por la emotividad, Guinness por la ejemplificante historia de Gareth Thomas, el Corte Inglés ha apostado por una factura de calidad cinematográfica, Pot Noodle ha decidido dar una vuelta de tuerca a la publicidad gayfriendly.
Son solo algunos de los múltiples ejemplos que consiguen enriquecer un mundo que se guía en demasiadas ocasiones por términos que están demasiado cerca de la frialdad de los números.
En el caso del diseñador Brian Atwood, la campaña que acompaña su nueva línea de zapatos se acerca a una publicidad más lúbrica. El norteamericano ha reunido a un monton de modelos masculinos (entre ellos Chad White y Walter Savage) que juegan en un ambiente homoerótico con sus cuerpos y los zapatos de la nuevos diseños de Atwood.
Bastante más que una simple diversión para los sentidos. Y es que Atwood parecer reformular conceptos como el de la masculinidad y el homoerotismo para elaborar una publicidad mucho más inclusiva.