Los cambios en redes sociales la mayoría de las veces son para mejorar la experiencia del usuario, pero las modificaciones no siempre son lo que los amantes de las apps esperan.
Instagrammers y Snapchatters enloquecieron cuando se dieron cuenta que la aplicación ya les permitía añadir gifs en sus imágenes, pero poco les duró el gusto. A pesar de que la función fue recibida de forma positiva, los creadores encontraron una falla en los gifs.
Aunque cada vez más usuarios se unían a la ola de gifs, surgió una queja de una parte de la población que reclamó por un presunto tema de discriminación.
Instagram eliminó los gif por esta situación
Las plataformas más populares de fotografía se dieron cuenta que algunas estampas animadas tenían contenido racista, razón por la cuál soliticitaron que Giphy, la proveedora de gifs, checara esta situación.
“Este tipo de contenido no tiene cabida en nuestra plataforma. Hemos detenida nuestra integración con Giphy mientras investigan en el problema”, aseguró Instagram en un comunicado.
Tras la denuncia, la empresa de gifs ya se encuentra trabajando para modificar la cuestión de las etiquetas racistas en sus filtros.