A pesar de que el VIH cada vez resulta menos mortal con un tratamiento correcto, los pacientes que están en tratamiento contra VIH son propensos a sufrir “slut shaming”.
Este concepto se utiliza para culpar por una forma irresponsable de conducirse por parte de la persona y tener demasiadas parejas sexuales o ser muy “libertina”; sin embargo, el Virus de Inmunodeficiencia va más allá de eso.
La FS Magazine de Gran Bretaña dio a conocer en un estudio que alrededor del 33% de los hombres que están en tratamiento de Truvada sufren el mal llamado “slut shaming”.
De esta forma el consumo de Truvada hace que los hombres sufran “slut shaming”
Gracias a este tratamiento, muchas personas pueden llevar una vida de calidad con una esperanza de vida mucho más amplia; sin embargo muchas personas siguen señalando a los pacientes como “culpables”.
Por muy irónico que parezca, las personas tienen la percepción de que los hombres en tratamiento para combatir el VIH “no cuidad de su salud o no les importa”.
El 48% de los usuarios del PrEP se han visto atacados porque aseguran que “lo único que deben hacer es utilizar condón”, mientras que alrededor del 43% aseguran que tomar el medicamento “los hace una puta”.
“Llamarse mutuamente putas, perezosos, irresponsables o promiscuos no ayuda para nada a detener este virus. Solo se necesita un encuentro para que las ETS o el VIH se transmitan”, aseguró Ian Howley, Director Ejecutivo de la Organización de los Derechos e Igualdad de la Salud.