Un hecho que ha encendido las alarmas en este 2018 es la popularidad que ha ganado el partido de ultraderecha, Vox; más aún ahora que está en duda los derechos de la comunidad LGBT.
Y es que el pasado 24 de diciembre Juan Marín y Juanma Moreno, líderes de Ciudadanos y PP firmaron el acuerdo de gobierno para terminar con el socialismo de la región.
Susana Díaz, aún en funciones, asegura que es momento de unirse en contra de C’s, pues asegura que lo que se está viviendo es una muestra “xenófoba, racista, machista, homófoba, anticonstitucional y que justifica la violencia contra las mujeres”.
Ahora, otro aspecto que hay que atender en Andalucía es la presencia de Vox, el partido que pretende derogar la Ley contra la violencia LGTBI.
Cabe señalar que la Cámara aprobó, por unanimidad de todos los partidos, la ley que reconoce los derechos de gays, lesbianas, transexuales, bisexuales e intersexuales, mientras que en 2014, también por unanimidad, se dio luz verde a una pionera Ley integral andaluza de Transexualidad.
La ventaja de Santi Abascal al poseer alrededor de 400 mil votos y la aprobación de al menos 12 escaños podría afectar con sus medidas que pretenden afectar el apartado social.
Entre sus ideas estaba el de no abordar temas de diversidad sexual en los centros escolares, así como tratar en los centros escolares la “familia natural”.
Es momento para mantenerse informados y no permitir que el retroceso se apodere de la sociedad, y mucho menos de la comunidad LGBT que ha visto mermados sus derechos con la llegada de PP y C’s.