Katy Perry – ‘Teenage Dream’

Disco: ‘Teenage Dream’

Artista: Katy Perry

Calificación: 7 / 10

Tras el innegable éxito internacional de ‘I Kissed a Girl’ y ‘Hot ‘n Cold’ -vaticinado y casi propiciado por la Madonna más cool hunter-, la californiana Katherine Hudson se ha convertido en un par de años en la artista pop más guay y trendy del panorama musical estadounidense -con permiso de la ubicua Lady GaGa-. Con la llegada de su segundo disco de estudio, la hegemonía de la Perry parece continuar avanzando en la dirección más adecuada -pa lo suyo, claro-.

Sabías que…

1. El sencillo de ‘California Girls’ lleva vendidas más de cinco millones de copias en todo el mundo.

2. Katy Perry creció escuchando principalmente música espiritual evangélica y cantando en misa.

3. Antes de conseguir el éxito con ‘One of the Boys’, Katy hizo dos intentonas fallidas: una como vocalista de un conjunto y otra en solitario.

4. En ocasiones es confundida -hasta por sus fans- con otra cantante, Zoey Deschanel, por su evidente parecido físico.


5. La edición limitada del álbum contiene un cedé adicional en un envoltorio especial con aroma -ojito- a algodón de azúcar.

‘Teenage Dream’ de Katy Perry

¿Cómo suena?

Tras el incuestionable éxito de un disco como ‘One of the Boys’, donde a lo sumo tres cortes sostenían sobradamente la justificación de todo el álbum, da gusto encontrarse con esta segunda grabación de Katy Perry, donde sus obvias aptitudes para la composición han sido engrandecidas por la sonoridad electrónica de una producción muy poco común en EE.UU..

Desde el inicio de la primera estrofa de ‘Teenage Dream’ hasta prácticamente la séptima canción, el cedé se caracteriza por aprovechar los pegadizos versos de la artista para alejarse de la concepción popi roqui que teníamos de ella. La nueva Katy Pery está interesada por explorar los sonidos discotequeros cercanos a la revisión synth que triunfa preferentemente en Europa y Australia, lo cual -aunque sólo sea por su independencia de los estilos que triunfan en Norteamérica- ya es digno de reconocimiento.

A las festivas e idílicas ‘Teenage Dream’ y ‘California Girls’ se les añade en la primera parte del disco ‘Last Friday Night’ -donde Katy se explaya sin complejos y nos cuenta cómo la lía cuando sale de fiesta-, ‘Fireworks’ -un posible próximo sencillo bastante gayfriendy, tenso y con ritmo en su estribillo-, ‘Peacock’ -canción ”picantona”, que también puede triunfar en EE.UU. por su tono de música para animadoras- y ‘Circle the Drain’, en la que se intuyen no pocas influencias de la electrónica británica-.

‘Love Get Out of My Way’ de Monarchy

La segunda parte del cedé está un poquito más dedicada a canciones románticas e introspectivas -en su mayoría-. ‘The One that Got Away’ habla sobre la nostalgia del primer amor y el fracaso del mismo, mientras que ‘E.T’ podría ser una canción de amor futurista más propia para las Pussycat Dolls -que al tener una producción tan ”europea” parece más una de las t.A.T.u-.

El momento en el que ya es más que evidente haber pasado el tramo fiestero del disco -y empezar a encontrarse en uno más reflexivo- es tras la escucha de ‘Who Am I Living For’ y ‘Pearl’, que tratan respectivamente la insatisfacción existencial de la cantante y las relaciones de pareja en la que se coartan los talentos individuales.

‘Humminbird Heartbeat’ sirve de contrapunto poprock con sintes para que la última parte del disco no parezca monótona, y ‘Not like the Movies’ es la balada ”de rigor” -que gracias a que Katy no es muy de sacar baladas, también se disfruta sobremanera-. El cedé lo completan dos canciones ya conocidas: ‘If We Ever Meet Again’ -el dúo con Timbaland- y la pegadiza colaboración de Katy con el conjunto 3Oh!3, llamada ‘Startrukk’.

Lo mejor: Te pueden gustar más o menos sus canciones, pero se debe reconocer que Katy Perry se aleja en forma -y en alguna ocasión también fondo- de la mayoría de cantantes que nos llegan de su país. ‘Teenage Dream’, ‘Firework’, ‘Circle the Drain’

Lo peor: Que a veces ha demostrado que su pose es algo ”postiza” -como cuando le sale el ramalazo de hija de predicador y da lecciones de moralidad a otras artistas o la lía con el ‘I Kissed a Girl’ sin que en su vídeo aparezca ninguna mujer besando a otra-.

Cómpratelo si… Prefieres a Gwen Stefani o Pink antes que a Britney o Christina Aguilera.

Sergio P. Sanjuán