Nuestra primera gran estrella internacional nos ha dejado. La actriz y cantante Sara Montiel ha fallecido en su domicilio de Madrid a los 85 años.
María Antonia Abad Fernández (Ciudad Real, 1928), conocida artísticamente como Sara Montiel, fue la primera artista de nuestro país en triunfar en Hollywood y saltó a la fama internacional por protagonizar la película ‘El último cuplé’.
En total ha participado en cerca de 60 películas y durante su etapa en EE UU trabajó junto a artistas de la talla de Gary Cooper, Burt Lancaster, Joan Fontaine, Mario Lanza, Vincent Price y Charles Bronson.
Un mito para varias generaciones, poseedora de una personalidad única, artista polifacética, musa del colectivo LGTB, adelantada a sus tiempos… Hoy el mundo de la cultura llora una perdida irrecuperable
Descubierta siendo una chiquilla tras cantar una saeta en la Semana Santa de 1941, Sara Montiel debuta en el cine con apenas 16 años y compartiendo el protagonismo de ‘Empezó en boda’ junto a Fernando Fernan Gómez.
Gracias al éxito de ‘Locura de amor’, a Sara Montiel se le abren de par en par las puertas de la industria de habla hispana más importante del mundo, el México del Cine de Oro.
Menos de un lustro después, México también se queda pequeño para esta diva que decide desembarcar en Hollywood. En su estreno en EEUU consigue meterse al público en el bolsillo. Su interpretación de la racial Nina en ‘Veracruz’ acompañando a Cary Grant y Burt Lancaster, la catapulta hacia el estrellato mundial…vitola que confirmaría con actuaciones memorables en películas míticas como ‘El último cuplé’ o ‘La violetera’
Al contrario que otras divas de la música de la época, Sara Montiel, nunca se vinculó al regimen franquista. La actriz y cantante fue una mujer adelantada a su tiempo, exagerada en todos los terminos.
Su atrevida forma de vestir -fue una de las primeras mujeres que lució pantalones en nuestro país- la llevó a sufrir el machismo. Se dijo entonces que el franquismo había puesto cortapisas a la fama de la española en Hollywood, por libertina. Sin embargo, ella siempre fue la dueña de su destino.
Tras su paso por México y Hollywood, la actriz regresó a España para rodar dos de sus películas más recordadas: ‘El último cuplé’ -1957- y ‘La violetera’ -1958-. ‘El último cuplé’ se mantuvo durante varios meses en la Gran Vía y su recaudación marco un antes y un después en la historia del cine español.
Las provocativas actuaciones musicales de la ”Saritísima”, con su voz susurrante y escotes de vértigo, conseguían regatear a la censura y a la vez hipnotizar a los espectadores; y su belleza y poderosa figura conseguía que sus estrenos se convirtieran en eventos nacionales. De este modo, Sara Montiel firma un contrato millonario que la convertiría en la actriz mejor pagada de la década
La llegada de la transición a nuestro país influyó de manera decisiva en el mundo del cine. A pesar de ser una de las figuras más eróticas de la historia de nuestro cine, Sara Montiel decidió no intervenir en las películas de ‘destape’ y en la década de los setenta se volcó en su carrera musical y teatral.
No obstante, y como podéis comprobar, Sara no se hizo al ‘destape’, más bien el ‘destape’ se hizo a ella.
A pesar de ser más conocida por sus boleros y cuplés, lo cierto es que Sara Montiel no se cerró a ningún estilo musical, ni se quedó anclada en el pasado.
Su paso al mundo de la televisión y el teatro sirvió para que una nueva generación conociese todo su arte. Su espectáculo ‘Ven al paralelo’ se convirtió en todo un clásico de la noche barcelonesa y de esta época data la grabación del disco ‘Purísimo Sara’, con colaboraciones de unos jovencísimos José María Cano, Joaquín Sabina y Javier Gurruchaga
En 2002, Sara reapareció en televisión grabando un chocante anuncio para los premios MTV Europe Music Awards de ese año… Y dejando ese ”Maaaaaaar…velous” para el imaginario colectivo.
En la gala de premios Sara también hizo un memorable ”cameo”, entregando el galardón a la Mejor Artista Femenina a una ”recién caída del guindo” Jennifer Lopez.
La diva, además de ser recordada y fuertemente admirada por toda ‘marica preconstitucional’ amante del cuplé y la tonadilla picantona -por no hablar de lo muchísimo que ha sido imitada en espectáculos de transformismo-, fue poderosamente reivindicada por uno de los conjuntos más icónicos para la comunidad LGTB de españa, Fangoria.
Además de señalar a Sara Montiel como clara influencia, Alaska y Nacho Canut contaron con ella en su álbum ‘Absolutamente’, para el cual la diva se prestó a grabar el videoclip de la canción que da título al disco, con un resultado kitsch y excesivo que no dejó impávido a nadie. Y es que otra cosa no, pero ‘absoluta’ lo era un rato Sara…