Miley Cyrus ha sido la última en Disneylandia en dar la campanada, pero no la única. Desde hace unas semanas las niñas del rosa repollo de todo el planeta sufrieron un shock al comprobar que su princesita favorita había decidido matar a Hannah Montana y subirse a la carroza de las poperas pilinguis.
Besos lésbicos, bodys de loba y una actitud transgresora se han quedado en agua de borrajas tras la publicación de unas fotos del caza famosos Pérez Hilton, en el que podemos observar que Miley no tiene ni un pelo de tonta. El último fenómeno juvenil de la factoría ha aparecido con su bajo vientre totalmente depilado en unas fotos que el bloggero ha publicado en twitter y que podría traerle problemas legales por tratarse de una menor. Pérez Hilton se ha apresurado a declarar que se trataba de un fotomontaje, sin embargo muchos consideran que lo que pretende es desvincularse de un posible delito de pornografía infantil.
Trucaje o no, un consejito para Hannah: ‘Hagas lo que hagas, ¡Ponte bragas!’
Ya nadie se acuerda de su pasado cinematográfico, ni de la niña angelical que fue. Hoy es famosa por otras razones, particularmente por sus cogorzas y juergas varias. No hay semana que no protagonice algunas de las páginas ‘Arggggggg’ de las revistas del corazón y su filón mediático sigue vigente.
Ella también ha sido pillada sin ropa interior y ha posado semidesnuda para un semanario. Parece que las nuevas princesas Disney están cansadas del corsé al que fueron sometidas y prefieren da un soplo de aire fresco a sus vidas y a sus partes.
Lindsay también ha matado a su personaje y ha preferido olvidar a base del tinto, aunque la resaca sea gore. Ni a Londres, ni a California, Lindsay se ha decantado por las fiestas de otra Hilton: Paris.
‘Intimísima’ de Lindsay y caracterizada por no usar ropa interior, ni siquiera de esa marca, Britney Spears comenzó su carrera como presentadora de Club Disney. Pronto dio el pelotazo con su ‘Baby one more time’, vestida cual Lolita del siglo XX y defendiendo la virginidad hasta el matrimonio.
Por entonces estaba con Justin Timberlake y tras la ruptura vino la debacle. Justin se apresuró a decir que de virgen le quedaba bien poco. Eso no hizo sino encumbrarla aún más como la joven promesa del pop, ratificado tras el beso lésbico con Madonna. Pero eso quizá ha sido lo más light de la nueva Britney; matrimonios fugaces, problemas con el alcohol y la pérdida de la custodia de sus hijos le hicieron tocar fondo.
Hoy vuelve a triunfar con ‘Circus’ y aunque intenta dosificar sus escándalos bien es cierto que el título le viene al pelo para cuando escriba su biografía.
Disney volvió a tropezar con la misma piedra con la elección de Jamie Lynn Spears como ‘Zoey’, una serie que trataba de reflejar en clave cómica la vida de una virginal adolescente americana. ¡Pero con las Spears volvió a topar y el tiro les salió por la culata!
Mucho menos virginal que su hermana, la popular Zoey pasó de fenómeno fan forracarpetas a icono de madre adolescente tras quedarse embarazada de su novio. Sus padres debieron de preguntarse qué habían hecho mal para engendrar semejante prole, pero ya lo vaticinaba el refrán: ‘de tal Spears tal astilla’.
Empezó con Britney en el Club Disney americano y aunque ha tardado en desmelenarse, su último videoclip no ha dejado indiferente a nadie. Christinita ya apuntaba maneras desde que en la adolescencia decidió operarse las tetas. Con semejante mamámenes grabó excitantes videos, pero nada que ver con su última locura.
Una vez desempolvada la botella, Christina Aguilera debió pedir a su genio convertirse en una popera verbena más. Ella ha puesto todo de su parte y, aunque recientemente ha sido madre, se ha pasado al sado para celebrar su maternidad. Masoca y lesbiana con imágenes que dejan su famoso trio con Britney y Madonna como una mera chiquillada.
Los fans y la industria han dado la espalda a esta nueva imagen en la que la cantante del ‘Sólo pienso en ti’ se ha convertido en una auténtica diablilla.
A su abuelita Julie Andrews casi le dio un jamacuco al verla enseñar tetamenes en una película de maricones, ‘Brokeback Montain’, su particular modo de decir al mundo que quería desencasillarse de su angelical imagen de princesita de la mano del cine independiente.
¡Y vaya si lo consiguió! A diferencia de las anteriores su transgresión ha ido unida a productos de calidad por lo que el salto de la adolescencia a la madurez de la actriz de ‘Princesa por Sorpresa’ y ‘El diablo viste de Prada’ ha sido todo un éxito.
A su abuelita Julie más que sonrisas le ha provocado alguna que otra lágrima que su nieta no quisiera ser princesa y se negara a la tercera parte de la exitosa saga.
Otra que se ha propuesto dejar con la boca callada a Hollywood ha sido Dakota Fanning, la intérprete infantil más premiada de los últimos años. Con sólo 16 añitos, la niña de ‘La guerra de los mundos’ o ‘Yo soy Sam’ se ha dado un pedazo de muerdaco lésbico con Kristen Stewart (otra que tal baila) en su última película ‘The Runaways’.
Una película que levantará ampollas y la que la actriz de Crepúsculo pretende, al igual que Hathaway, liberarse de cualquier vestigio que pueda quedar de aquella criaturita que conmovió a la meca del cine.
Volviendo a parafrasear el refranero popular ‘Disney las cría y ellas’ se juntan a juzgar por la amistad que han fraguado algunas de estas pendejas fiesteras. En la ‘fragoneta’ de la party aún queda sitio para nuevas niñas prodigio que decidan subirse a este motorizado carro del verbeneo y del desmadre.
Paris ya le ha enviado invitación a Miley y estamos seguro de que el nuevo rostro juvenil del canal de Mickey Mouse, Selena Gómez, pronto de despendolará ante sus fans. Tiempo al tiempo, porque está claro que en pleno siglo XXI las niñas de ayer ya no quieren ser princesas.