Fobias famosos

Uno de los últimos estudios del National Institute of Mental Health revela que entre el 8 y el 18% de los americanos posee algún miedo irracional o fobia a algún elemento o circunstancia y, cómo no, los famosos no podían librarse.

Algunas veces excéntricos, es por todos conocido que las celebrities poseen una serie de caprichos y delirios. Sin embargo, cuando el miedo supera al antojo las estrellas se jiñan como los que más.

¿Quieres conocer cuáles son los puntos débiles de Brad Pitt, Orlando Bloom, Barbra Streisand o Carmen Electra? Pues permanece atento a esta galería que más que temor te producirá carcajada.

Absurdas, traumáticas, irracionales o ridículas, los famosos vuelven a demostrar que son como niños.

Pese al haberse dado a conocer como una de las vigilantes de la playa más sexies y recordadas, Carmen Electra posee un miedo atroz al agua. ¡Menuda vigilante! Ni siquiera sabe nadar, aunque hay que confesar que tiene otras dotes para el puesto.

Comparte miedos con Michelle Pfeiffer o Winnona Ryder que, pese a tener la mano un poco larga, no puede evitar echarse a temblar al oir hablar del agua.

Otra exvigilante también padece un miedo irracional y algo paradógico. Se trata de Pamela Anderson y de su miedo a verse reflejada en los espejos.

Pese a ser una de las siliconadas más deseadas del planeta a esta rubia oxigenada no le mola nada ver su reflejo, quizá consciente del mal gusto que tiene a la hora de vestir y al contemplar lo mucho que se ha pasado con el bisturí.

Los hombres también son unos miedicas y Orlando Bloom encabeza la lista al odiar a los pobres cerditos como Babe. Desconocemos si le gusta el cochinillo asado o cocinado, pero lo que está claro en que no le veremos en ninguna de las ediciones televisivas de ‘La granja’.

Como pirata tiene un pase, pero como granjero… Su amigo George Clooney podría ayudarle a corregir su fobia y aseguro que a algo más.

La australiana posee un miedo inconsciente hacia las mariposas desde su infancia. En palabras de la propia actriz, ni siquiera podía abrir una puerta si uno de estos insectos andaba cerca.

No nos sorprenden las fobias a los insectos y arácnidos, muy comunes entre la población. Sin embargo, la excentricidad de Nicole es una de las que más nos ha sorprendido.

Uno de los que posee miedo a los arácnidos es Justin Timberlake, un chico malo al que jamás veremos rodeado de tarántulas en uno de sus videoclips. Es una fobia frecuente como el miedo que el cantante también posee a los reptiles.

Reptiles e insectos suelen llevarse la palma en esto de los pánicos. Sin ir más lejos, Scarlett Johansson no soporta las cucharachas.

Muy pocos conocen el término pero son mucho los que lo padecen. Brad Pitt posee selacofobia o, lo que es lo mismo, pánico a los tiburones. Es conocedor de que somos muchos los que deseamos hincarle el diente, pero Pitt no está dispuesto a que éste sea un tiburón.

Comparte fobia con Timberleke que, pese a su aspecto de machote, ha resultado ser toda una ‘nenaza’, a juzgar por los innumerables miedos que posee.

De nada le sirve tener una de las voces más privilegiadas del planeta, ya que la Streisand estuvo 27 años sin cantar en público por su incapacidad de superar ese miedo desde que en 1967 se le olvidara la letra de una canción.

Podían haber heredado esta fobia alguno de los triunfitos que, pese a equivocarse en las letras edición tras edición, siguen martirizándonos cada verano con los denigrantes discos chiringuiteros cortesia de vale music.

Dice su círculo próximo que Madonna reacciona como una niña cada vez que hay tormenta, dado el terrible pánico que la cantante, actriz, modelo y escritora posee hacia los truenos. Un miedo que parecía premonitorio, ya que su aclamada sucesora ha llegado como un rayo a los primeros puestos de ventas.

Es por ello que la gagafobia no ha tardado en extenderse como una epidemia entre las divas poperas más asentadas. Christina Aguilera está en estado crítico.

Y acabamos nuestro fobiático recorrido con Johnny Depp y Duff Diddy a los que hemos diagnosticado de clownofobia, lo que viene a ser miedo a los payasos.

A nosotros nos parece una payasada semejante miedo, pero ellos se deben jiñar cada vez que ven a alguien maquillado de clown. Una paradoja más, de unos de los actores que más veces hemos visto como muñeco clown de Tim Burton.