Ya sea por su popularidad, por su comodidad o porque nunca se pasan de moda, el vaquero se ha convertido en una prenda capaz de definir al hombre. Porque cada hombre suele ser fiel a un estilo según su forma de ser y su personalidad.
Así para los atrevidos, que les gusta llamar la atención y no pasar desapercibidos, un vaquero ajustado, tipo pitillo, en un amplio abanico de colores será su prenda más recurrida.
Mientras para los más modestos, el de pata recta predominará en su fondo de armario. Y para los más tímidos y vergonzosos, los vaqueros anchos serán su prenda más buscada.
De cara al verano, el color más buscado para unos vaqueros es sin duda el blanco.
Color sinónimo de calor y buen tiempo, el denim blanco se convierte en un complemento tan usable como combinable.
Camisetas con formas o dibujos animados, muy de moda esta temporada, y en diferentes tonos, acompañadas de unas zapatillas consiguen junto un vaquero blanco un estilo tan informal como de moda.
Mientras, si los combinas con camisas, zapatos y un buen cinturón, el denim blanco es capaz de conseguir un estilo mucho más elegante y de noche pero rompiendo toda formalidad.
Si hay una prenda universal, que nunca falta en ningún armario y que sobrevive temporada tras temporada, ése es el vaquero.
Rectos, anchos, ajustados, de pitillo… los vaqueros siempre han sido capaces de combinarse con todo. Desde lo más elegante hasta lo más informal.
Esta temporada, como no, los vaqueros vuelven a ser una de las prendas de fondo de armario más buscadas.
Y para esta primavera-verano, el denim por el que más se apuesta es el desgastado.
Aunque parezca que del vaquero ya está todo inventado, cada año las firmas de moda se las ingenian para darle una vuelta más al clásico denim, convirtiéndolo en un nueva prenda de temporada.
Este año, la tendencia vaquera para el hombre es reafirmar el desgastado.
En colores más claros o más oscuros el vaquero vuelve a dar esa sensación de viejo y usado pero muy a la moda.
Con mayor o menor degradación de color, el desgastado consigue romper el vaquero más clásico, aportándole un estilo mucho más casual e informal.
Además, de cara al calor y la temporada veraniega, los vaqueros largos vienen con doble vuelta en los bajos y por encima de los tobillos.
Y en su versión bermuda, más para el campo o la playa, con un degradado un poco más intenso, los vaqueros se quedan por encima de la rodilla.
Pero el desgastado no sólo vendrá en el clásico color azul y en su variantes clara u oscura.
Colores vivos y veraniegos como el rojo con ciertos toques desgastados también se convertirán en el complemento perfecto de camisas y camisetas, consiguiente un estilo casual muy a la moda.