Sergio P. Sanjuán / 8-1-2010
Es uno de los actores de cine X gay de más reconocimiento internacional, así como uno de los más valorados y solicitados por sus compañeros de profesión.
A Damien Crosse no le asusta prácticamente nada, excepto cuando la censura hace pedazos alguna de sus escenas -que lo suyo le costará rodarlas…- ¿Te gustaría saber más de él? Pincha en la imagen para seguir leyendo
La recientemente estrenada ‘Piss Off’, en la que Damien interpreta uno de los papeles principales, ha resultado ser una polémica cinta que no ha superado el análisis para su clasificación -que aunque el porno sea porno, parece que también necesita de categorías-.
Según la oficina de calificación canadiense este será un producto que difícilmente pueda ser comercializado en este país, por su excesivo metraje dedicado a los watersports -lluvias doradas, para los menos políglotas-
Ante este suceso suponemos que Damien no ha podido hacer otra cosa que respirar hondo y resignarse, pues la verdad que no es la primera vez que le ocurre algo parecido.
Hace aproximadamente un año a la película ‘To The Last Man’ le ocurrió prácticamente lo mismo, pues fue vetada en algunos canales de venta alegando que con sus escenas fomentaban la violencia gratuita. Para leer más sobre este caso pincha aquí
Desde sus primeras apariciones como actor porno Damien Crosse se ha caracterizado por superarse a sí mismo en las escenas, dotándolas de un mayor contenido morboso y sexy. Quizá sea esta la razón de por qué en tan poco tiempo se ha hecho todo un nombre dentro de la profesión
Para que os hagáis una idea, uno de los primeros trabajos que Damien tuvo que sacar adelante consistía en una escena pseudo amateur en la que tenía que hacerse pasar por un primerizo y dejarse magrear por otro chico, tan ‘curioso’ y salidorro como él -y así fomentar la fantasía hetera de muchos de los consumidores de este género cinematográfico-
En 2006 Damien fue contratado en exclusiva por la mítica productora de porno Titan, con la que rodó las películas que más rápidamente consiguiero que su popularidad subiera como la espuma.
De esta época se pueden destacar títulos como ‘Hitch’, ‘Folsom Filth’, ‘H2O’ o ‘Warehouse’ como los más vendidos y disfrutados
No obstate, la época en la que Damien ha participado en mayores súper producciones comenzó en 2008, año en el que expiró su contrato en exclusiva con Titan y comenzó a involucrarse en los proyectos de otra de las grandes productoras X: Raging Stallion.
Películas como ‘Hotter than Hell’ o la saga ‘To the Last Man’ le han llevado a ser nominado en varias ocasiones a los premios Grabby y XBIZ, aunque por el momento no se ha hecho con ninguno de ellos
Debido al remarcable éxito que se ha forjado en los últimos años, Damien es uno de los actores más solicitados en las ferias de porno y reuniones fetichistas de todo el mundo. Por eso es muy frecuente verlo detrás de alguno de los stands de las productoras para las que ha trabajado haciendo pasar un buen rato a los asistentes
El mundo del cine porno también le ha traido a Damien una de los mejores regalos posibles, conocer a su pareja. El también actor Francesco D’Macho -que anteriormente también estuvo relacionado con la mega estrella Françoise Sagat- y él forman una de los dúos más morbosos dentro y fuera de la pantalla desde entonces
La excelente relación que comparten estas dos estrellas del cine X ha resultado tan estable y duradera que decidieron convertirla en matrimonio en mayo del año pasado, a las afueras de la ciudad de Madrid.
Imaginaos ahora la corte de chulazos que habría en la ceremonia y banquete si a la pareja le hubiera dado por invitar a todos sus compañeros de trabajo
Aparte de haberse casado, Damien y Francesco se han establecido como socios y han hecho arrancar una pequeña productora con sede en Madrid que poco a poco ha comenzado a despegar a nivel internacional.
StagHomme es su nombre, y entre los productos que ofrece destacan los shows en vivo por Internet y los DVDs con encuentros íntimos y morbosos entre la pareja y otros actores
Ya habéis visto como este cubanoamericano de tan sólo veintisiete años no ha parado desde que decidió montarse en el tren del cine para adultos. Es casi imposible no pensar que de aquí en adelante estará bien presente en nuestros pensamientos libidinosos -y quizá nos haga girar el cuello para admirar su físico si lo encontramos por la calle-.
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