Justo cuando creías que tu dieta no podía ir mejor, llega esta noticia que tal vez te haga replantearte el sentido de la vida, de acuerdo con estudios químicos realizados alrededor del mundo, han salido a la luz indicios de que la lechuga no es el mejor aliado.
Aunque este alimento es vendido y comercializado como uno de los mejores vegetales, resulta que es solamente agua, no aporta nutrientes ni vitaminas que son importantes para que los humanos logren rendir en el día.
De acuerdo con las tablas de alimentación, una lechuga contiene alrededor de 45 calorías, y para lograr obtener una fuente más fuerte calórica tendrías que comer demasiadas piezas de este vegetal, tanto que terminarías con edemas cerebrales, dolor de cabeza, alucinaciones y hasta un coma.
La lechuga solo es buena… ¿si se cocina?
De acuerdo con los médicos, las lechugas solo son buenas siempre y cuando se expongan a temperaturas muy altas, ya que el tronco de este alimento suele ser un foco de bacterias que solo se pueden eliminar cuando se cocinan.
De acuerdo con algunos macronutricionistas con reconocimiento a nivel internacional, más allá de que la lechuga te ayude a tener un metabolismo eficiente, resulta que estas cero saludables hojas verdes contribuyen a que el tránsito intestinal se haga exageradamente lento.
Con la lechuga retienes líquido
Al hacer lento el metabolismo, la lechuga hace que tampoco te deshagas muy fácil de los líquidos en tu cuerpo.
Otros estudios arrojan que una lechuga tiene tantos agentes nocivos que sería mejor dejar de consumirla, contrario a lo que expresan las campañas publicitaras. ¿A quién le crees?