Durante su participación en Gran Hermano Duo, Kiko Rivera confesó sus problemas con las drogas y lo duro que fue salir de ellas.
Así se vio en Límite 48 Horas, donde el DJ se sinceró y habló de la dura depresión que vivió al depender de diferentes sustancias.
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Aseguró que pudo salir de un entorno que es “muy malo y sólo trae problemas” en gran parte gracias a su esposa, Irene Rosales, con quien participa en el reality.
“Gracias a mi mujer, a mi madre y a mis amigos de verdad he conseguido salir de ese mundo (…)Se lo agradeceré a Irene y a mi madre hasta el día en el que me muera”, dijo.
Pese a dificultades Kiko Rivera logró dejar sus vicios
Kiko se puso como ejemplo de que, aunque cueste demasiado, si se quiere es posible salir de las adicciones.
“Gracias a Dios lo he superado, a base de médicos, de psicólogos, de lucha, a base de amor”.
De igual forma, reveló que su adicción era por la marihuana, el hachís y la cocaína. Aceptó que nunca había hablado sobre esta parte de su vida pero que ya lleva año y medio sin consumir nada.
“Hachís y marihuana consumía todos los días, cocaína no. Para mí, ir a trabajar era pegarme una fiesta, no rendía en mi trabajo”, contó.
Además, recuerda que lo más duro fue confesarse ante su familia, así como los primeros días de desintoxicación y sus efectos físicos, como los temblores y sudores fríos.
“Se puede conseguir si estás dispuesto a hacerlo”, aseguró.