Atención, que un nuevo concepto se suma a la amplia gama de variedades sexuales: los g0ys. Que se escriba con un cero en lugar de la letra «o» y por ello sea imposible de pronunciar no es casual.
Los g0ys se mueven casi exclusivamente en redes sociales y, en realidad, son hombres gay que no quieren ser identificados como tales.
Para ellos gay es un concepto demasiado amplio en el que cabe tanto el machito estereotipado como la drag queen, y eso no los satisface porque no quieren una identidad tan diversa, sino una identidad exclusiva.
Un g0y valora especialmente la masculinidad, tanto la que dan como la que ofrecen (el “varonil para varonil” tan de moda en Grindr), y rechaza explícitamente el sexo anal o a la gente obvia.
El problema es que, conforme se va popularizando el término, empieza a crearse toda una diversidad dentro de los g0ys. Algunos, por ejemplo, tampoco se consideran homosexuales, precisamente porque consideran que al rechazar el sexo anal, precisamente no lo son.
¿Entonces qué hacen los g0ys? Muy sencillo. Tal cual están las cosas, uno no puede asumir que un hombre sea heterosexual solo porque diga no ser gay ni bisexual.
A lo mejor es un g0y. Y aunque para muchos “g0y” es un concepto que nace de la fusión de clóset y hipsterismo, con un toque importante de homofobia interiorizada (puestos a poner etiquetas, nadie es gay en general, sino que cada uno es un tipo concreto de gay, si no varios, igual que no todos los heterosexuales son como Juan Gabriel y nadie ha inventado aún el término «heter0» para definir al hombre heterosexual especialmente masculino, porque sería francamente ridículo, ¿no?), el caso es que ser g0y ostensiblemente tiene un punto de sinceridad porque dice exactamente lo que es y lo que busca.
Si el hombre que te gusta es un g0y y le atraes, podrás tal vez tener una relación interesante, aunque cuentan que los dolores de cabeza que se pasan tratando de entender qué quieren de la vida, no necesariamente valen el sacrificio… pero ya lo saben: Love is Love.