La Francia de Emmanuel Macron empieza con muy buen pie su administración, ya que el presidente de la asociación SOS Homophobie en el país ha confirmado que los primeros refugiados LGBT ya han llegado a tierras francesas directos desde Chechenia, huyendo del régimen exterminador y homofóbico.
Recordemos que en Chechenia no esconden ya su homofobia desde todas las fuerzas del orden, convirtiéndola en su prioridad número 1.
Dan igual los asesinos, pederastas o ladrones, la policía chechena tiene órdenes de capturar homosexuales y asesinarlos y torturarlos en los campos de concentración que han habilitado en antiguas cárceles. En pleno 2017 y sin ningún país reaccionando.
Esto es, sin duda, una buena noticia, pero no deja de ser un parche de un problema mucho más grande
¿Vamos a dejar que un país aniquile literalmente a los homosexuales y los eche de su tierra por su sexualidad?
¿Por qué no se van ellos si tanto odio tienen dentro?
Está claro que los homófobos no se van de Chechenia porque nadie les aguantaría, pero imagina que te echaran de tu país por vivir libremente tu sexualidad sin hacer daño a nadie. La solución no está solamente en acoger refugiados. Se ha de hacer porque tenemos dignidad humana, pero no debe ser la solución final.