La policía británica investiga el reciente caso de acoso al ex futbolista Stan Collymore, después de que el atleta escribiera una comunicación a todos sus seguidores de la red social Twitter en la que denunciaba ser víctima de recibir amenazas de muerte y comentarios racistas.
El ex deportista narró a los periodistas cómo hace dos años recibió insultos racistas por parte de dos estudiantes de derecho, hecho del que derivó la encarcelación de uno y el pago con servicios comunitarios de otro.
No obstante, el atleta comenta que en esta ocasión la policía ‘se está dando golpes contra un muro’ para conseguir la indentificación de los instigadores involucrados en este escarnio masivo.
La cadena ha mostrado los tweets en los que Collymore denuncia este abuso, los cuales reproducimos.
Collymore ha afirmado haber sido contactado a través de la misma red social por varios gais y lesbianas que también has sufrido ataques LGTBfóbicos y coinciden con él en que Twitter tiene la responsabilidad y obligación de combatir los tweets ilegales.
Lo único que consigue (Twitter) es facilitar un vacío legal para los abusos antisemitas, racistas, homófobos, sexistas y de las personas que discriminan a la gente con discapacidad.