Lo primero que debéis tener en cuenta es que en nuestro país, en el caso de las bodas entre gais y lesbianas no hay opción a las bodas religiosas, por lo que no tenéis que solicitar ni partidas de bautismo ni asistir a cursillos prematrimoniales.
Una vez aclarado este punto, comenzamos con la larga lista de documentos que tendréis que presentar -que no son otros que los que se necesitan en cualquier otra boda civil-.
Instancia de matrimonio y declaraciones juradas: Estos documentos os los facilitarán en el Registro Civil, el lugar al que tendréis que acudir para abrir vuestro expediente matrimonial. Allí os pedirán también vuestro DNIs o pasaportes en vigor. No olvidéis llevar la fotocopia y el original, ya que os lo pedirán para compulsar la copia que entregáis.
En el Registro os pedirán también un certificado literal de nacimiento. Para conseguir este documento, que debe tener una antigüedad menor al año, debéis acudir al Registro Civil de la ciudad en la que nacisteis. Y por último, no os olvidéis del Certificado de empadronamiento o residencia. Se obtiene en el Ayuntamiento donde hayas residido los dos últimos años y caduca a los 3 meses de haberlo obtenido.
Si no os habéis llegado a empadronar en la ciudad en la que queréis casaros, se os pedirá que demostréis que vivís allí con documentos como contratos de alquiler, cartas de la empresa para la que se trabaja o los recibos de la luz, el agua, etc, entre otros.
En el caso de que alguno de los dos esté divorciado, es necesario que aportéis el certificado literal del matrimonio anterior junto con la anotación marginal de divorcio. Y lo mismo sucede si alguno de los dos estuvo antes casado y enviudó.
Una vez que tengáis hechos todos los trámites, el registro tardará una media de entre 30 y 50 días.
Debéis tener también en cuenta que tanto en los juzgados como en los ayuntamientos, las bodas se suelen celebrar en días laborables y por la mañana. Aunque puede haber variaciones dependiendo del municipio. Hay algunos que permiten celebrar la boda fuera del mismo -pero dentro de su circusncripción territorial- o durante el fin de semana, aunque estos son los menos.
Nuestro consejo en estos casos es que te cases en la intimidad en el día que ellos te propongan y que después celebres una ceremonia simbólica con tus amigos y familiares en el mismo lugar del convite. ¡Pero todo ello te lo explicaremos en otro post!
Fuente: zankyou.es