¿Qué nos espera este año en Eurovisión?

Corría el 2000 cuando el ‘Fly on the Wings of Love’ del dúo Olsen Brothers -más tarde reinterpretado como el éxito dance veraniego del año– le daban la segunda victoria de la historia de Eurovisión a Dinamarca.

Trece años después -y si el directo acompaña a Emmelie de Forest- el país nórdico volvería a hacerse con la victoria en Malmö -algo así como si España lo ganará en Palma de Mallorca-. Aunque claro, para que esto segundo sucediera tendría que producirse una conjunción planetaria alrededor del bidé de Esperanza Gracia.

No es nada nuevo, descuidad..

Raquel, Juan Luis y David ya saben que tampoco en 2013 el triunfo en Eurovisión será para España. No tiene nada que ver con ser agorero, pero en los últimos años pocas veces las encuestas han fallado. Y cuando lo hacen, tampoco nos toca el premio gordo.

El Sueño de Morfeo presentará ‘Contigo hasta el final’ en el escenario del festival de este año, con una escenografía constituida por un gaitero, una pasarela, varios reflejos lumínicos y un puñado de lámparas poliédricas que suben hasta el ”cielo” del recinto de la gala… -aunque no sabemos si deberíamos esperar llegar tan alto y lejos como ellas…-

Caballo ganador

Este año la gran favorita es la canción ‘Only Teardrops’ de la danesa Emmelie de Forest, aunque según afirma ella desciende de la Reina Victoria de Reino Unido ya que su abuelo era supuestamente hijo ilegítimo de Eduardo VII.

Con sangre real o sin ella lo cierto es que los Eurofans se han volcado con su canción y su puesta en escena a lo ‘Juego de Tronos’.

Hay que ver lo que gusta en el festival una señora descalza y un poco de épica, no entiendo como en su día Remedios-cero-puntos-Amaya se quedó tan traumatizada. Que la recuperen para la causa.

‘Only Teardrops’ de Emmelie de Forest

Que ‘Only Teardrops’ sea la favorita no quiere decir que sea la mejor. Hay propuestas que la secundan que otros años -o en otros festivales- arrasarían.

Este es el caso del vozarrón noruego de Margaret Berger con su ‘I Feed You My Love’ o la sensación de que Italia lleva unos años mereciendo poner su música en lo más alto de Europa.

Por otro lado, Anouk por los Países Bajos, Cascada como representante alemana o la festivalera Suecia viven, con sus buenas propuestas, en situaciones similares.

Atentos, eso sí, a los votos que se llevará Ucrania –telita con el videoclip– o la suerte de Sugababes recién caídas por un terraplén que manda Serbia; pues como diría Uribarri ‘son países con amigos y cuyas canciones gustan en la Europa más oriental’. Tampoco suponemos que la balada de aspiración ‘Glee’ de Rusia quede mal clasificada, al igual que la sorprendente ‘Crisalide’ de San Marino.

Los eurofans estarán de acuerde en que echaremos de menos las habituales actuaciones de Bosnia y Herzegovina, Turquía y sobre todo los vecinos Portugal. Tampoco acudián a la cita televisivo musical Eslovaquia, Andorra, Luxemburgo -que ha ganado cinco veces el festival-, la República Checa, Mónaco o Polonia. Incluso Marruecos llegó a participar en el festival de la canción europea -y por qué íban a tener que privarse de hacerlo-.

No obstante, Eurovisión no fue inventada anteayer, y para prender la emoción de la incertidumbre y las apuestas se han sacado de la manga un nuevo sistema para recontar los votos que puede dar sorpresas -y que puede hacer que Emmelie se vuelva al bosque con las orejas gachas y el rabo entre las piernas-.

Este cambio no será suficiente para El Sueño de Morfeo o para TVE, que espera tener unas audiencias del nivel de la tarde de Anne, pero quizás brinde la oportunidad de vivir el seño azerbaiyano junto a Farid Mammadov.

‘Hold Me’ de Farid Mammadov

Semifinales: 14 y 16 de mayo Final: 18 de mayo en TVE