Desde Imagina MÁS nos gustaría hablar sobre un recurso todavía poco conocido pero que sin embargo nos puede ayudar a evitar transmisiones del VIH. Hablamos de la profilaxis Postexposición No Ocupacional -denominada en siglas PPENO-. Pero, antes de explicar en qué consiste la PPENO hay que entender qué son prácticas de riesgo.
¿En qué casos se está teniendo una práctica de riesgo?
El riesgo de transmisión del VIH depende de muchos factores, como el tipo de práctica de riesgo, la carga viral de la persona fuente, si hay lesiones o sangrado, etc.. Lo que describimos a continuación está tomado de la guía de actuación del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad para evaluar las prácticas de riesgo:
Vía Sexual:
Se considera de riesgo alto la recepción anal con eyaculación sin preservativo, con rotura o mal uso del mismo -por ejemplo, condones de tallas superiores que provocan deslizamiento del mismo o el uso de lubricante elaborado con aceite que provoca la descomposición o rotura del condón, etc.-
Asímismo, se considera riesgo menor, pero no inexistente:
- La recepción vaginal con eyaculación sin preservativo, con rotura o mal uso del mismo.
- La recepción anal sin eyaculación.
- La recepción vaginal sin eyaculación.
- La penetración anal sin preservativo, con rotura o mal uso del mismo.
- La penetración vaginal.
- El sexo oro-genital receptivo o pasivo con eyaculación sin preservativo, con rotura o mal uso del mismo y riesgo mínimo el sexo oral sin eyaculación.
Vía Parental:
Riesgo apreciable:
- Compartir jeringuilla, aguja u otro material de inyección usado.
- Pinchazo profundo o con abundante sangrado con una jeringuilla de forma inmediata tras haber sido usada.
Riesgo bajo:
- Utilizar una jeringuilla usada de origen desconocido.
- Pinchazo superficial o con un pequeño sangrado con una jeringuilla de forma inmediata tras haber sido usada.
- Contacto de sangre abundante o con mucosas.
Riesgo mínimo:
- Compartir el resto del material: recipiente, el agua de la preparación, el filtro, los algodones…
- Pinchazo con un pequeño sangrado con una jeringuilla de procedencia desconocida.
¿Qué es la PPENO?
La PPENO es el tratamiento antirretroviral que se prescribe a personas que no tienen VIH pero que han tenido alguna práctica de riesgo para intentar evitar la transmisión del VIH. El tratamiento se suministrará durante 4 semanas e incluye una combinación de diferentes antirretrovirales.
Hay que tener en cuenta que la PPENO puede ayudar a evitar la transmisión del VIH pero no en el 100% de los casos, es por eso por lo que debemos tomar esta medida como algo excepcional e intentar tomar siempre los medios necesarios para evitar realizar prácticas de riesgo.
He tenido una práctica de riesgo, ¿qué debo hacer?
Para saber si necesitas tomar la profilaxis postexposición lo primero que convendría saber es el estado serológico de tu pareja sexual, es decir, si tiene VIH o no. Para ello vamos a exponer 3 casos:
- Si la otra persona no tiene VIH el riesgo es inexistente.
- Si tiene VIH con carga indetectable el riesgo es mínimo.
- Si en cambio tiene VIH pero con una carga viral alta o no sabes su seroestatus, puede que el riesgo sea alto.
Hay que destacar que solicitar la PPENO es un derecho que tenemos todos los ciudadanos, no obstante, la decisión de tomarla o no debe ser evaluada por un doctor.
El tratamiento PPENO conlleva varios efectos secundarios severos, por lo que existe un buen número de pacientes que abandonan el tratamiento aun tratándose de solo 28 días. El tratamiento es un recurso más para prevenir transmisiones del VIH pero debemos intentar llevar una vida sexual sana y satisfactoria, ¡utiliza el condón!
Si tienes alguna duda sobre el funcionamiento de la PPENO puedes ponerte en contacto con el equipo de Imagina MÁS a través de salud@imaginamas.org.