Si en el primer año de existencia ya tuvieron la oportunidad de participar en ‘Alaska y Coronas’ (un programa de televisión con audiencia nacional) junto a la incontestable Terremoto de Alcorcón, y en su segundo año actuaron en un repleto Cadogan Hall de Londres junto a Pink Singers, el coro LGTBI más veterano de Europa, este tercer año de existencia no les depara menos proyectos interesantes: tras su paso por el programa Got Talent de TeleCinco (alcanzando unas meritorias semifinales) y la preparación de su nuevo espectáculo (que seguro traerá muchas sorpresas y novedades), son varias las propuestas internacionales que aparecen en su horizonte.
Pero entre estas propuestas, que incluyen cantar en París junto a Equivox (coro pionero en Francia en la lucha del colectivo LGTBI por la igualdad de derechos) durante la celebración del Orgullo LGTBI o acudir a Denver (Colorado) para participar en el mayor festival internacional de coros y formaciones artísticas LGTBI del mundo, hay una que centra, ahora mismo, todo el interés, esfuerzo y energía del Mallorca Gay Men’s Chorus: cantar en el Carnegie Hall de Nueva York en el mes de noviembre, en el estreno nacional de una obra de corte clásico.
Invitados formalmente por la Distinguished Concerts International New York City (DCINY) para participar en uno de sus eventos (reconocidos internacionalmente por su calidad y prestigio), no solo como reconocimiento a su labor como músicos, sino como embajadores de Mallorca y de toda la comunidad LGTB. En palabras de Jonathan Griffith, Director Artístico y Primer Director de DCINY:
El MGMC recibe esta invitación debido a la calidad y el nivel musical demostrado por sus cantantes, y por la calidad de su audición. Entendemos que el solo hecho de haber sido invitados a actuar en Nueva York es todo un honor. Estos maravillosos músicos no sólo representan una calidad musical, sino que también se convierten en embajadores de toda su comunidad. Un motivo de orgullo para cualquiera y merecedor del reconocimiento y el apoyo de esa comunidad.”
Puesta esta invitación en conocimiento de diversos organismos públicos, ahora mismo se trabaja mano a mano con ellos para intentar llevar a buen puerto este proyecto. Proyecto que, de llevarse a cabo, supondría para Mallorca una oportunidad única de hacer brillar su nombre en uno de los templos mundiales más afamados de la música: el Carnegie Hall de Nueva York.