Una serie con mucho bombo y poco platillo
La definiría como una mezcla entre ‘El internado’ y ‘Crepúsculo’. Y es que, la falta de originalidad es el menor de sus problemas. Ya que como viene ocurriendo en este país las series no evolucionan. Pero no se le puede pedir peras al olmo. Y no es un desprecio. La ficción española cambia lo que cambia el público. Si intenta adelantarse, se queda atrás. Sino alguien me puede explicar por qué series como ‘La Fuga’, ‘Ángel o Demonio’o ‘Punta Escarlata’, aunque no eran series punteras sí merecían más. Me quedo con que es más importante el cómo se cuenta que el qué se cuenta.
Viendo la serie uno ya adivinaba lo que iba a pasar: una chica adolescente enamorada del chico malo que esconde un secreto, un puñado de graciosetes y lobos. Porque la historia va de eso, de Hombres lobo. ¿Todo un reto para ver efectos especiales? Porque por ahora, no hemos visto casi ninguno y los que han aparecido son de traca.
Lo que si hay que destacar son los actores. Tanto Belén Rueda, Olivia Molina o Daniel Grao hacen un papel impecable. Lo que me llamó la atención es la ausencia de niños, en las últimas series siempre habían aparecido