Los mejores besos LGTB de la historia del cine-I

Desde que en la película ‘Marruecos’ de 1930 Marlene Dietrich (como frikidetalle decir que la actriz alemana se aprendió el guión fonéticamente puesto que apenas tenía conocimientos de inglés) diera el primer beso lésbico de la historia del cine, han sido mucho los besos LGTB que han iluminado las pantallas del séptimo arte.

Por eso, en la semana grande del cine (post-Goya y pre-Oscar) queremos hacer un repaso a los mejores besos LGTB de la historia del cine:

‘Brokeback Mountain’

Protagonistas: Heath Ledger y Jake Gyllenhaal

Tras rodar ‘Tigre y dragón’ -2000- y ‘Hulk’ -2003-, Ang Lee sorprendía a la crítica y al gran público con una película llena de sensibilidad; ‘Brokeback Mountain’. En el filme, Heath Ledger y Jake Gyllenhaal protagonizan escenas sexuales en las que no predomina el erotismo, sino un profundo amor entre los protagonistas.

Muchos países decidieron censurar las escenas de pasión (y algunos de ellos más cercanos de lo que creemos), pero mucho público también recibió el efecto llamada de ver a dos actores jovenes, con talento, atráctivos…y con una gran química en pantalla.

‘Juegos Salvajes’

Protagonistas: Neve Campbell y Denise Richards

Siguiendo la estela de ‘Instinto Básico’ -1992- en la década de los noventa la cartelera ‘made in Hollywood’ se llenó de películas que tenían en el erotismo uno de sus puntos fuertes. Al igual que ‘Showgirls’ de Paul Verhoeven, ‘Juegos salvajes’ pertenece a esta saga de filmes.

En este caso, el director John McNaughton decidió dar una vuelta de tuerca y montar un trío entre Neve Campbell, Denise Richards y Kevin Bacon…trío en el que las chicas aprovechan cualquier momento para darse un atracón lésbico y calentar tanto al público homo como hetero.

‘Una casa en el fin del mundo’

Protagonistas: Colin Farrell y Dallas Roberts

El estadounidense Michael Mayer rodó en 2004 está cinta en la que nos muestra de manera latente la tristeza y supervivencia de los dos protagonistas.

El filme comparte con ‘Brokeback mountain’ el punto de vista de las escenas más íntimas. Al igual que en la película de Ang Lee, aquí Colin Farrell y Dallas Robets protagonizan escenas en las que el amor y la ternura prima sobre el morbo.

‘Crueles intenciones’

Protagonistas: Sarah Michelle Gellar y Selma Blair

Tras pasar la adolescencia protagonizando una de las series más gayfriendly de la historia de la televisión (‘Buffy, cazavampiros’), Sarah Michelle Gellar tenía tablas suficientes para dar lecciones lésbicas a cualquier actriz curiosa.

La ocasión para demostrar sus concocimientos, la llegó a la Gellar con la película ‘Crueles intenciones’, en la escena que nos ocupa enseña a una inocente Blair el arte de besar con pasión, con lengua y, por que no decirlo, con hilillo de saliva incluido.

‘Y tu mamá también’

Protagonistas: Gael García Bernal y Diego Luna

En este filme, el mexicano Ricardo Guarón realizó un erótico relato del despertar sexual de dos jovenes amigos. Aunque pertenecen a clases sociales muy distintas, Julio y Tenoch son grandes amigos. En una fiesta conocen a Luisa, una deprimida chica española casada con un primo de Tenoch, con la que se escapan en un viaje hacia ninguna parte.

De la mano de Luisa (interpretada por Maribel Verdú), Julio y Tenoch realizan un recorrido iniciático por el sexo, camino por el que terminan descubriendo que Julio y Tenoch son algo más que amigos.

‘Vicky Cristina Barcelona’

Protagonistas: Scarlett Johanson y Penélope Cruz

No es de extrañar que el público lésbico quisiera levantar una estatua en honor a Woody Allen tras ver la película ‘Vicky Cristina Barcelona’. Y es que el genio neoyorquino consiguió reunir en una escena de alto voltaje a dos mujeres de bandera; Scarlett Johanson y Penélope Cruz.

La escena es corta, las luz roja de la habitación de revelado no es la más adecuada, pero seguro que más de un@ vió recompensada el precio de la entrada por este tórrido minuto.

‘Trampa mortal’

Protagonistas: Michael Caine y Christopher Reeve

El beso protagonizado por un jovencísimo ‘Superman’ y por el actor más elegante de Gran Bretaña, es como un símbolo de lo que ha avanzado el mundo del cine (en algunas latitudes) respecto a la presencia de personajes abiertamente homosexuales en sus cintas.

En Inglaterra se conoció a esta escena como la del beso de los diez millones de dólares, puesto que su inclusión final en el filme hizo que muchos espectadores no acudieran a las salas de cine y la película supuso un auténtico fracaso en taquilla.