El filósofo Bertrand Russell indicó algo así como que: ”el problema con el mundo es que los estúpidos están seguros de todo y los inteligentes están llenos de dudas”. La frase se puede aplicar a la perfección a la sociedad rusa añadiendo que en este caso, los estúpidos disponen de las armas que ofrece el poder.
El episodio que ha protagonizado el catálogo de Ikea en el exgigante soviético vuelve a confirmar el estado de especial fragilidad que vive el colectivo LGTB en una región en la que desde las instituciones se fomenta la segregación de aquellas personas que se escapan de los patrones heteronormativos.
Y es que la felicidad de ver a una pareja gay liderar el concurso anual de la empresa sueca ha tornado en decepción y frustración al comprobar que la pareja formada por Lev Polyakov y su novio ha desaparecido de la web y por lo tanto del concurso.
Como todas las noticias que nos llegan desde Rusia, la cuestión está envuelta en más misterio que la edad de Cher. La empresa no ha realizado ningún comunicado de prensa para aclarar la situación y todo lo que nos llegan son rumores.
Por un lado, se ha indicado que Ikea no haya tenido más remedio que eliminar a la pareja del concurso por las leyes del país, algo que tendría sentido si tenemos en cuenta que en Arabia Saudi, la empresa ha borrado a las mujeres de sus catálogos.
Por el otro, se ha afirmado que ha sido la propia pareja la que ha decidido retirarse del concurso debido a la popularidad que estaban alcanzando. ¿Presiones, amenazas, miedo? Una cosa es segura, la LGTBfobia ha vuelto a ganar otra partida en Rusia. Deseamos que sea la última.