Kylie Minogue – ‘Aphrodite’

Disco: ‘Aphrodite’

Artista: Kylie Minogue

Calificación: 7.5 / 10

Lleva más de dos décadas sacando álbumes con resultados que rozan indistintamente la consagración internacional o la ignominia más deshonrosa. Cansada de tanta irregularidad, parece que Kylie quiere apostar ‘en seguro’ con ‘Aphrodite’. Aunque el haberse garantizado este éxito en el presente tampoco le ha supuesto perder un ápice del ”rollazo” que derrocha por donde va.

Sabías que…

1. Stuart Price es el productor de ‘Confessions on the Dancefloor’ de Madonna y de ‘Night Work’ de Scissor Sisters, entre otros exitosos cedés y remezclas de populares artistas internacionales.

2. La fiebre surgida en el Orgullo por su visita y actuación ha propiciado la mejor entrada de un disco de Kylie en las listas de ventas españolas, debutando en el tercer puesto en tan solo dos días.

3. Kylie devolverá la colaboración de Jake Shears -Scissor Sisters- en su disco grabando los coros para el nuevo single de la banda, ‘Any Wich Way’.

4. Kylie es la única artista en la historia de éxitos del Reino Unido que tiene un álbum número uno en cuatro décadas consecutivas.

‘All the Lovers’ de Kylie Minogue

¿Cómo suena?

‘Pop dance refrescante con influencias synthpoperas’: Ésta podría haber sido perfectamente la frase con la que Kylie explicó a Stuart Price cómo quería que sonara ‘Aphrodite’. Supongo que todos estaremos de acuerdo en que a la australiana el pop dance le va como anillo al dedo, y desde la época de Stock, Aitken y Waterman, se puede decir directamente que Kylie es synhtpop y viceversa.

Después de que ‘X’ fuera recibido de una manera tan irregular por sus seguidores -cosa que tampoco es del todo comprensible-, Kylie parece haber decidido no protagonizar ningún flop en ventas más. Para ello ha trabajado con el ‘seguro a todo riesgo’ que representa Stuart Price, que en la última década está firmando muchos de los mayores éxitos de artistas como Madonna, Seal, The Killers, Keane…

Quizá por su actual situación personal -o porque le sale del mismo aussie– Kylie también ha hecho un disco de lo más eufórico y feliciano, en el que se auto identifica con la diosa Afrodita y pretende contagiar a todo el mundo con sentimientos e ilusiones amorosas -idea que el videoclip de ‘All the Lovers’ ilustra perfectamente-.

Además de la ya archiconocida ‘All the Lovers’, en el álbum se encuentran ‘Get Out of My Way’, una explosión dance muy ‘juvenil’ por la que se han estado dando galletazas para grabarla -sin éxito, claro- otras divas como Britney Spears; ‘Put Your Hands Up’, una de las canciones con aire más retro y de asunción casi inmediata; ‘Closer’, de una teatralidad más tensa; o ‘Everything is Beautiful’, la primera pelín pastelosa -en la que han colaborado Fraser T. Smith y Tim Rice-Oxley de Keane-.

El ecuador del disco nos hace toparnos con la canción que le da nombre. La primera en la que se puede constatar perfectamente la independencia formal de la que la artista ha hecho gala en muchas ocasiones del pasado. Con una guitarra eléctrica y una batería marcial remata otra de las canciones que podría casar a la perfección en su primera etapa.

‘Ilussion’ es un medio tiempo en el que también se reconoce a la Kylie que es capaz de adoptar y sacar partido al R&B sin meterse en camisas de once varas. ‘Better than Today’ es la más pop y country de todo el disco, un probable single del futuro que podrá escalar puestos en las listas por ser básica y directa, con una melodía muy reconocible y un ‘tiroriro’ de lo más comercial.

La última parte del disco la forman el cuarteto upbeat formado por ‘Too Much’, ‘Cupid Boy’, ‘Looking for an Angel’ y ‘Can’t beat the Feeling’. Sin duda un acierto que vuelve a subir el listón del ritmo dentro del cedé y que deja con un buen sabor de boca al finalizarlo, trasladándonos de nuevo al inicio -pero con ganas de dar otra vuelta más en la atracción-.

Lo mejor: Que Kylie se desmarca de la tónica genérica de otras vocalistas de 2010, que con sus canciones y atuendos parecen que sólo quieren dar la impresión de zumbadas y viciosas. ‘Closer’, ‘Aprhodite’, ‘Too Much’, ‘Cupid Boy’.

Lo peor: Que la rúbrica de Stuart Price comienza a perder especifidad. Si no hubiera dado con una artista como Kylie, el disco hubiera destacado por impersonal.

Cómpratelo si… Te apetece tener un disco ideado y orientado para que pases ‘el verano más feliz de tu vida’. Si te gustaron ‘Light Years’ y/o ‘Fever’.

Sergio P. Sanjuán