‘Guys, Light, and Nature’: el íntimo homoerotismo de Manuel Moncayo

Las Guerrilla Girls se quejaban de que menos del 5% de los artistas que tienen obras en los distintos museos de arte moderno del mundo son mujeres, pero un 85% de los desnudos son femeninos. 

La protesta, que acierta en el mismísimo centro de la diana, también se podría extender a los desnudos masculinos puesto que a lo largo de la historia el cuerpo masculino se ha conceptuado como símbolo de fuerza, poder, corpulencia o solidez, pero en pocas ocasiones se ha indagado en la intrínseca belleza de los cuerpos masculinos.

Al igual que sucediese con la explosión de las vanguardias artísticas de principios de siglo pasado, la fotografía ha adquirido una especial relevancia a la hora de desarrollar nuevos objetos de estudio. Y es que los objetivos fotográficos se han convertido en los nuevos retratistas de nuestra sociedad. 

Wilhelm Von Gloeden, Robert Mapplethorpe, Richard Avedon, el mas contemporáneo David Vance, el ya mítico David LaChapelle… hay un puñado de notables artistas que han convertido al desnudo masculino en su particular musa y han creado diversos universos donde la fragilidad, vulnerabilidad y la virilidad confluyen creando paraísos sensoriales para los snetidos. 

El jovencísimo Manuel Moncayo (1989) y su primera obra ‘Guys, Light and Nature’ se pueden enmarcar dentro de esta corriente que, a través de sus obras, logra saltarse los dictados heteroburgueses que dirigen el mundo artístico actual.

El objetivo de este artista mexicano afincado en Berlín consigue captar la belleza de lo efímero. De algún modo, la cámara de Moncayo no solo captura si no que se encarga de aprehender la belleza de los desnudos masculinas. Una belleza que trasciende de la propia existencia humana y se funde con una naturaleza más viva que nunca. 

Su primer libro de instantáneas que sale el próximo mes de diciembre a la luz bajo el nombre de ‘Guys, Light and Nature’ así nos lo confirma. Un lírico estudio del desnudo masculino y de la naturaleza que se combinan para mostrarnos una belleza inexplorada y eterna.