La descubrimos en ‘Precious’ y caímos rendidos ante esa mirada que parecía contener toda la tristeza del mundo. Desde entonces, Gabourey Sidibe siempre se ha mostrado como una actriz valiente, con una fuerte personalidad y ajena a las declaraciones teledirigidas que tanto abundan en el mundo hollywoodiense.
Actualmente la podemos ver en el tétrico y delicioso universo de ‘American Horror Story’ donde se mete en la piel de Queenie, una estudiante de la Academia Miss Robichaux, que es una auténica chica dura. Se auto proclama ‘muñeca vudú humana’, y con un puntito sádico es capaz de transferir las heridas auto-infligidas y el dolor asociado con ellos hacia otra persona.
A lo largo de estos días la hemos podido ver en el Festival de Tribeca donde ha presentado una película de temática LGTB en la que se mete en la piel de una joven lesbiana. En la presentación de ‘Life Partners’, la actriz ha ofrecido unas declaraciones que son todo un alegato a la visibilidad y normalización del mundo lésbico en el cine.
Lo primero que ha dejado claro es que tenía muchas ganas de meterse en la piel de una lesbiana:
Tenía muchas ganas de interpretar a una lesbiana, algo que supongo os tomaréis como típico de una nerd. Mi mejor amiga del mundo es lesbiana y pensé que sería divertido hacerlo”.
Sin embargo, a lo largo de la grabación de la película, Sidibe cayó en la cuenta de que colocar un muro de división entre personajes heterosexuales y homosexuales no era la mejor manera de acercarse al personaje y que simplemente se limitó a dejarse llevar por su personalidad:
Una vez que me presenté en este papel, me di cuenta realmente cómo interpretar a una lesbiana no es diferente. Todo tiene relación con la historia que se cuenta , y es lo mismo que meterse en la piel de una persona hetero. Pero realmente me gustó, porque el personaje tenía que ser un poco chulesco”.