El Dr. Robert Spitzer, acreditado como la principal influencia facultativa que consiguió que la Asociación Americana de Psiquiatría votara en 1973 para dejar de tratar la homosexualidad como una enfermedad, ha fallecido el pasado viernes a los 83 años.
Según ha manifestado su esposa, el reconocido psiquiatra norteamericano ha muerto en Seattle, ciudad en la que residía desde hace unos meses, a causa de una insuficiencia cardíaca.
El Dr Spitzer trabajó en la redacción de varias ediciones del manual del Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, permitiendo la salida de la homosexualidad de la clasificación moderna de los trastornos mentales.
En su argumentación a favor de este gran paso para la comunidad LGTB, el facultativo sostuvo que la atracción homosexual no podría ser una enfermedad mental si las personas no tenían ningún problema con su sexualidad.
Su trabajo fue considerado entonces por el movimiento homo, bi y trans como un avance social sin precedentes para el colectivo, puesto que anteriormente la homosexualidad era contemplada en el manual como un ‘trastorno sociopático de la personalidad.’
No obstante, el Dr. Spitzer enfrentó a principios de los 2000 una grave polémica al apoyar las pseudoterapias de cambio de orientación sexual, algo que fue tomado como traición por parte del activismo de los derechos LGTB hasta su retractación.
Hace tres años, el Dr Spitzer pidió disculpas por el estudio que apoyaba estas prácticas, que definió como ”defectuoso” y como ”lo único de lo que se arrepentía profesionalmente en toda su carrera”. En sus palabras:
Creo que le debo a la comunidad gay una disculpa por mi estudio que defendía afirmaciones no probadas de la eficacia de la terapia reparativa .[…] De la misma manera pido disculpas a cualquier persona gay que haya desperdiciado tiempo y energía al someterse a algún tipo de terapia porque pensaron que yo habñia demostrado su efectividad con individuos altamente motivados.’