Si hace pocas semanas os acerábamos la noticia del concierto homenaje que se celebrará en Londres por el sesenta aniversario del Festival de Eurovisión -al que acudirá Rosa López como representante española- hoy nos ha sorprendido la confirmación de una nueva candidatura para la edición de este año.
Se trata de la de Australia, que a pesar de no pertenecer a la Unión Europea de Radiodifusión, el permanente apoyo al certamen que ha mostrado durante las últimas tres décadas les ha dado un pase directo a la final de la próxima edición, que se celebrará en Viena el 23 de mayo.
De esta manera, Australia compartirá los privilegios reservados al llamado big five gracias al trabajo de su cadena pública, que a través de su asociación con la UER lleva los últimos treinta años retransmitiendo el festival para el público antípoda.
De la misma manera, la audiencia podrá favorecer la entrada de algunas candidaturas en la gala final, ya que votará en las dos semifinales del certamen, que serán celebradas los próximos 19 y 21 de mayo, respectivamente.
”Building bridges”
La decisión de permitir a Australia participar en la próxima edición de Eurovisión está en consonancia con el eslógan que Austria ha creado para la ocasión, ‘Building Bridges’ -construyendo puentes-, que también puede tomarse como continuación del mensaje de paz y tolerancia que promueve por todo el mundo su última ganadora, Conchita Wurst.
A pesar de que todavía no tienen elegido su representante, cabe la posibilidad de que Australia se alzara como ganadora, pues concursa con el mismo estátus que cualquier otro miembro del big five. En ese caso tendría la obligación de organizar y sufragar el próximo certamen, eso sí, en una ciudad de Europa.