Una artista única
Cada uno tenemos nuestros gustos, nuestras filias y nuestras fobias… Pero hay cosas que son innegables, como afirmar que Björk posee una de las voces más personales del mundo de la música de estas dos últimas décadas. A lo largo de sus casi tres décadas como cantante -19 años en solitario- la curiosidad de Bjork ha ido creciendo con el paso del tiempo.
Por eso, la islandesa ha tocado casi todos los palos musicales, desde sus inicios punk junto a la banda Tappi Tíkarrass hasta la publicación de este último disco, Björk ha pasado por etapas hardcore, más surrealistas -junto a los ‘Sugarcubes’-, fuertemente influenciada por el jazz -publica un disco en 1990 bajo el nombre de ‘Gling-Gló’-, por el folk o por la música electrónica y experimental.
En ‘Biophilia’, Bjork hace un trabajo completo, redondo. Propone una ambiciosa obra conceptual que transciende el formato clásico en el que la artista desarrolla una temática global en la que fusiona distintos campos como la ciencia, la ecología, las nuevas tecnologías, con instrumentos hechos a medida, siempre en la búsqueda de los sonidos más vanguardistas.
Un estreno de lujo
La islandesa ofrecerá el primer gran concierto internacional de muchos que albergará la Cidade da Cultura, y además será el único que la artista ofrezca en nuestro país fuera de un festival.
Diseñada por el arquitecto americano Peter Eisenman para acoger las mejores expresiones de la cultura de Galicia, España, Europa, Latinoamérica y el mundo, esta nueva ‘ciudad’, inclusiva y plural quiere convertirse en una ‘factoría de proyectos’ que dinamice el tejido de las industrias culturales gallegas, una plataforma que dé visibilidad a lo mejor de las expresiones artísticas y un punto para el intercambio de ideas y experiencias, conectando Galicia a las redes nacionales e internacionales de creatividad y conocimiento… El próximo 22 de junio comienza el espectáculo