El título del documental dedicado a la figura de uno de los grandes fotógrafos del último medio siglo es como una dulce patada en los huevos al conservadurismo norteamericano. Y es que el nombre del documental hace mención a la frase pronunciada por el senador Jesse Helms en el que denunciaba la obra de Mapplethorpe.
El reaccionario político norteamericano acusaba a la obra del fotógrafo de ser pornográfica, de estar contra los profundos valores morales El documental se basa en la frase pronunciada por este reaccionario senador para reflejar un significado totalmente opuesto. Un destello que luce libre de prejuicios y con el que se intenta hacer justicia a uno de los artistas más irreverentes y personales de las últimas décadas.
Basta con echar un vistazo al trabajo de este artista para repetir la expresión ”mira las fotos”, pero cambiando su sentido peyorativo original por una versión mucho más reivindicativa. Y es que, foto a foto, Robert Mapplethorpe se ha encargado de derribar numerosos estigmas sociales.
La subcultura gay, el sadomasoquismo, el sexo interracial, el exhibicionismo…el fotógrafo fallecido por sida en 1989 obliga al espectador a salir de su gris zona de confort para establecer un descarado diálogo en el que el artista nos muestra que la subversión es el mejor camino para desnudar la verdadera naturaleza de las cosas.