¿Me hago la brasileña o me dejo ‘patillas’?
Según el reportaje del prestigioso diario, la depilación ‘por debajo del cinturón’ se ha estandarizado entre los hombres estadounidenses que acuden a los centros de estética. Si antes era más común pedir el perfilado de cejas, pecho o espalda, del año pasado a éste se ha duplicado el número de peticiones de depilado púbico.
El periódico además señala que no existe un perfil determinado del hombre que solicita este servicio, aparte del asociado al mundo del deporte. Según NYTimes la depilación púbica es un fenómeno ‘en la comunidad gay, en la hetero, en chicos presumiblemente conservadores y también en los más progresistas’.
Desterrando mitos anquilosados
La tradición nos suele hacer pensar que los hombres son más pudorosos a la hora de pedir ciertos servicios en los centros de estética. No obstante -y teniendo en cuenta lo íntima que es la zona de la que estamos hablando- parece que últimamente comienzan a cambiar esta pauta.
El reportaje señala que los hombres que acuden a estos negocios ya toman el depilado púbico como ‘hábito rutinario’, y que sus razones para querer llevar ‘el atún calvo’ tienen cada vez un componente más cercano a la propia comodidad, aunque la gran mayoría de los clientes reconocen que lo hacen por cuestiones de estética