La carrera musical de Annie Lennox ha ido evolucionando a la estela de sus inquietudes. A lo largo de los ochenta, su androginia se convirtió en una de las señas de identidad de Eurythmics, banda con la construyó algunos de los himnos musicales más escuchados de la década.
Con la llegada del nuevo siglo, Lennox empezó a mostrar una mayor preocupación por causas sociales y con el avance de la década del dos mil se convierte en una de las artistas que muestra una mayor actividad en la siempre difícil cuestión del VIH.
En el año 2007, publica un tema que se ha convertido en todo un himno en la lucha contra esta pandemia. Se trata de ‘Sing’, corte que nace del compromiso de Lennox con la fundación Nelson Mandela y con la Treatment Action Campaign (TAC), organizaciones que luchan a favor de los DDHH y la salud de los afectados por el virus VIH.
El tema ‘Sing’ no solo sirve para crear una conciencia mundial sino que la propia Lennox se ve sacudida por el drama de esta pandemia. Así, la cantante se ve en la obligación de entrar en acción y crea Sing Campaign, con la que busca crear conciencia ante la problemática del VIH, recaudando fondos y previniendo la propagación de la enfermedad.
Al recibir su galardón, se pudo ver a una Lennox visiblemente emocionada. La cantante ofreció un discurso desde el corazón en el que quiso destacar que:
Me siento muy agradecida al recibir un premio tan importante e histórico como la Medalla Livingstone. He sido testigo de numerosas transformaciones sociales, sin embargo, todavía hay muchas cosas por hacer antes de que podamos ver el final de la pandemia del VIH, que ha devastado la vida de millones de hombres, mujeres y niños de todas las regiones del mundo. Mi contribución ha sido pequeña, mi sueño sería ver el fin del SIDA en un futuro no muy lejano.”