Hay cosas que terminan igual de mal que comienzan; así han sido los tres años que ha pasado Ana Mato al frente del Ministerio de Sanidad. Un desastre tras otro, por mucho que vayan equipados con bolsos Louis Vuitton y rayos uva, que la convirtieron en la ministra peor valorada por los españoles.
Ahora, haciendo balance de sus años al frente de Sanidad, diferentes asociaciones se están movilizando para reclamar que la persona que la sustituya al frente de tan delicada cartera cambie de rumbo e impulse políticas más igualitarias.
La directora de la Fundación Mujeres, Marisa Sotelo, ha explicado que el próximo Ministro debe ser una persona con ‘conocimientos y comprometida con la importancia de los derechos de las mujeres’ y ha matizado que, en un Gobierno no paritario, les gustaría que se ‘conservara’ la presencia de una mujer al frente del Ministerio.
Sotelo ha afirmado que durante el mandato de la ministra Mato ‘se ha producido un retroceso en políticas de igualdad y de prevención de la violencia de género’ criticando la ‘perdida de protagonismo’ del Ministerio, en relación a la coordinación de las políticas en esta materia.
Oportunidades perdidas
En este sentido, ha criticado que un tema como el aborto, que ‘antes recaía integramente’ dentro de las competencias del Ministerio de Sanidad, ahora ‘sigue estando en el ámbito de Justicia’.
Asimismo, la directora de la Fundación Mujeres ha destacado que ‘había una parte muy importante del tejido social feminista que mantenía una posición muy crítica con la posición del Ministerio’ y ha recordado que bajo el mandato de Mato ‘se ha perdido la especialización del organismo de Igualdad”.
Por su parte, la presidenta de la Federación de Mujeres Separadas y Divorciadas, Ana Mª Pérez del Campo, ha señalado que espera que el nuevo cargo reconozca y aborde la violencia de género y la situación de desigualdad que persiste entre uno y otro sexo.
Además, Del Campo ha subrayado que si tuviera que elegir a una persona se descantaría por alguien que supiera qué es el feminismo, qué es la defensa de los derechos humanos de las mujeres y qué es la violencia. ‘En este sentido, la persona que he visto que más se acerca a estas ideas en Blanca Hernández, presidenta del Observatorio de Violencia de Género‘, ha añadido.
Recortes graves, consecuencias funestas
También ha indicado que durante el mandato de la Ministra de Sanidad los recortes que se han efectuado en materia de violencia de género son ‘verdaderamente graves’ y ha señalado a este respecto, que se ha transmitido a la sociedad un mensaje que no se corresponde con la realidad ya que la violencia ‘no ha disminuido, sino que ha aumentado’.
‘Lo que ocurre es que hay menos recursos y eso hace que las mujeres se planteen tomar la decisión de si piden o no el divorcio, que en muchos casos es el detonante final para que el maltratador acabe con sus vidas’, ha indicado la presidenta de la Federación de Mujeres Separadas y Divorciadas.
Además, ha señalado que la violencia de género es ‘la ley de leyes’ ya que es un tema ‘transversal’ y toca todos los Ministerios.
En este sentido, Del Campo ha querido subrayar que para acabar con la violencia de género es preciso pasar por la educación de las personas para establecer como principio esencial la igualdad entre los sexos.