La Ley de Amnistía aprobada este miércoles por el Parlamento ruso para conmemorar el vigésimo aniversario de la Constitución del país permitirá la salida de prisión de cientos de personas condenadas por crímenes no violentos, principalmente ancianos, mujeres embarazadas o madres de niños y víctimas del desastre nuclear de la central de Chernobil.
Durante su extensa comparecencia ante la prensa, Putin también ha dicho que las dos miembros del grupo Pussy Riot que están encarceladas, Madezhda Tolokkonikova y María Alyojina, también se verán beneficiadas por la Ley de Amnistía.
Sin embargo, pocas cosas cambian en la rancia Rusia gobernada con mano de hierro por Putin. El Presidente ha querido dejar claro que la actuación del grupo punk fue ‘vergonzosa’.
El presidente ruso ha señalado que no tiene dudas de que Rusia ha tratado correctamente este caso a pesar de las críticas que ha recibido de otros países y de organizaciones extranjeras. ‘No lamento que ellas hayan acabado entre rejas’, ha asegurado.
‘Lamento que tengan un comporamiento tan vergonzoso, que, en mi opinión, fue degradante para la dignidad de la mujer’, ha afirmado. ‘Traspasaron todos los límites’, ha sido la paradójica conclusión con la que Putin ha terminado el discurso…efectivamente, en Rusia se han traspasado todos los límites, pero no por parte de un grupo punk, sino por parte de un gobierno a la deriva.