Juchitán, Oaxaca fue una de las zonas más afectadas por el sismo que se registró el pasado 7 de septiembre y ahora su reconstrucción es liderada por mujeres transgénero, conocidos como muxes.
Los habitantes de este poblado mexicano junto a su comunidad trans se organizaron para reparar los daños de distintas viviendas:
“Empezó a temblar despacio y pensamos que era eso y ya. Entonces comenzó el estruendo, la oscuridad. La gente gritando. Toda la gente llorando“, cuenta Peregrina Vera, muxe de 26 años.
Ante la tragedia y en solidaridad con sus vecinos, las muxes han enterrado amigos, familiares, y han creado una red de apoyo dedicada a recoger escombros, buscar y repartir víveres, ropa en respuesta a la pasividad de las autoridades, según el portal web Desastre.
Incluso comentan: “Tenemos un grupo de WhatsApp y ahí andamos hablando para saber cómo están las familias, quiénes fueron las más afectadas y cómo se va a hacer la ayuda”.
Reconstruirse como el ave fénix
Aunque muchos perdieron su patrimonio y algunos no tienen ingresos debido a los daños en sus lugares de trabajo, los muxes junto con la comunidad no se detienen y continúan peleando.
“Habrá que reconstruirse como el ave fénix. Hay que volver. Quiero gritar que estoy viva“, dice Martha Toledo.
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