Según están informando varios medios estadounidenses, su Departamento de Estado obligará a todas las instituciones de la administración nortemericana a respetar la igualdad de trato entre los matrimonio hetero y los homosexuales.
Esta medida se aplicará a procesos como las declaraciones de bancarrota, las comparecencias judiciales o las visitas familiares en centros penitenciarios.
El fiscal general estadounidense, Eric Holder, desarrollará el siguiente pensamiento en un discurso -al que ha tenido acceso el diario ‘The New York Times’- el próximo sábado:
En todos los tribunales, en todos los procedimientos y en todo lugar en el que haya un miembro del Departamento de Justicia en representación de Estados Unidos, se esforzará para garantizar que los matrimonios de personas del mismo sexo tengan los mismos privilegios, protecciones y derechos que los matrimonios de personas de distinto sexo’.
Estos cambios son consecuencia de la sentencia emitida en junio por el Tribunal Supremo en la que declara inconstitucional que el Estado a nivel federal rehúse conceder los mismos beneficios a las parejas homosexuales.
Desde entonces se han modificado distintas leyes federales para que las parejas homosexuales puedan presentar una declaración de la renta conjunta y acogerse a programas sanitarios de Medicare hasta ahora reservados únicamente a parejas heterosexuales. Holder apoyó desde el primer momento la sentencia del Constitucional y los cambios en estas normas.