Los miembros más presurosos del colectivo LGTB en Francia no han dejado escapar ni un día para hacer uso de la nueva ley de matrimonio igualitario de la mejor manera posible; haciendo uso de él.
El presidente Hollande promulgó la nueva ley del matrimonio igualitario en Francia el pasado 18 de mayo y según la legislación del país deben pasar al menos diez días desde que la ley entra en vigor para celebrarse los primeros enlaces.
Bien, el mismo sábado en el que se daba un gran paso hacia delante en cuanto a los derechos del colectivo LGTB se refiere, la alcaldesa de la ciudad de Montpellier, Helene Mandroux, anunciaba la celebración del que podría ser el primer matrimonio gay en el país galo
Un día histórico
El Ayuntamiento de esta localidad, controlado por el Partido Socialista, celebrará el 29 de mayo la unión de Vincent Autin, activista de derechos de los homosexuales, de 40 años, y su compañero Bruno, de 30…que automáticamente pasarán a formar parte de la historia de la lucha por los derechos del colectivo LGTB en Francia.
El acto, que no debería pasar de ser anecdótivo, se ha convertido en un símbolo de la lucha por las libertades en Francia. Los sectores más conservadores del país (encabezados por el partido UPM) insisten en que seguirán luchando contra el matrimonio igualitario (hay que recordar que está apoyado por el 60% de la población francesa). Incluso el UPM ha dado un paso más: ha montado una nueva manifestación contra la nueva ley y ha indicado que si llega al poder del país terminarán maquillando la nueva ley.
De este modo, la boda que está proyectadá para el próximo día 29 confirma las palabras de Hollande, que ha advertido que será garante de que ”la ley se aplique en todo el territorio con plena efectividad y de que no (aceptará) que se puedan perturbar las bodas”