El Gobierno argentino luchará contra las operaciones de cambio de sexo clandestinas

En los últimos años, el Gobierno argentino ha dado grandes pasos en favor del respeto a la Diversidad y el reconocimiento de los derechos fundamentales de su población LGTB. Y de un teimpo a esta parte se han centrado en el colectivo trans, uno de los que corren mayor riesgo de acoso violento y exclusión.

Si hace pocos días recogíamos el proyecto que compensará económicamente a las personas transexuales y travestis represaliadas durante la dictadura, hoy nos alegramos de conocer que el Gobierno argentino estudia la manera de mejorar el acceso del colectivo trans a las terapias de reasignación y la cirujía estética.

Tal y como ha informado el viceministro de Salud, Daniel Gollan, el Gobierno quiere evitar las prácticas quirúrjicas ilegales de cambio de sexo que intoxican, deforman y matan a cientos de personas transexuales al año en todo el mundo. 

En declaraciones a radio La Red, el viceministro explicó que su Ejecutivo ‘está reglamentando una ley que le da una serie de derechos’ a las personas que quieran cambiar de sexo. Una norma que beneficiaría a unas 2.000 personas en toda Argentina.

Según afirma el viceministro Gollan, el Gobierno tiene la intención de poner a disposición del colectivo un hospital público, para que las personas transexuales no recurran a supuestos cirujanos y esteticistas no acreditados que usan silicona industrial para modificar sus anatomías.