La cantante estadounidense Ariana Grande actuará el domingo 4 de junio en Manchester (noroeste de Inglaterra), casi dos semanas después del atentado, al término de un concierto suyo, en el que murieron 22 personas, anunciaron los organizadores este martes.
“La música está para consolarnos, para unirnos, para hacernos felices”, dijo en un comunicado la cantante, que estará acompañada en este concierto benéfico, para ayudar a las víctimas, de artistas invitados como Justin Bieber, Coldplay, Katy Perry, Miley Cyrus y Pharrell Williams.
El concierto, explicaron los organizadores, servirá para “homenajear y reunir fondos esenciales para las víctimas y las familias que se vieron trágicamente afectadas por el atentado”.
El Emirates Old Trafford Cricket Ground, uno de los estadios de críquet más importantes del país, será el escenario del recital. Las gradas de este recinto pueden albergar a unas 26,000 personas, a las que habrá que sumar las que ocupen el terreno de juego.
“No nos iremos, no viviremos con miedo. No permitiremos que esto nos divida. No dejaremos que el odio triunfe. Nuestra respuesta a la violencia deber ser estar más unidos, ayudarnos”, prosiguió la artista de 23 años.
“Seguiremos honrando a aquellos a los que perdimos, a sus seres queridos, mis fans y a todos los afectados por la tragedia”, concluyó.
Lo cierto es que finalmente esta semana se ha recuperado el curso normal de la vida en Manchester con la reapertura de la estación Victoria y la vuelta al trabajo tras un lunes festivo, mientras sigue la investigación del atentado.
Catorce sospechosos permanecían bajo custodia policial este martes, mientras sigue la búsqueda de otros cómplices en la preparación del atentado, reivindicado por la organización yihadista Estado Islámico (EI). “La investigación avanza muy rápido”, dijo a la BBC el comandante de la policía de Manchester, Ian Hopkins.
Hopkins confirmó que el kamikaze era Salman Abedi, un británico de padres libios de 22 años, quien estaba fichado por la policía “por delitos relativamente menores”, sobre todo robos, cuando era adolescente, en 2012, no por posiciones extremistas.
Desde el atentado, se suceden los homenajes en la ciudad. Desafiando la lluvia, cientos de personas observaron el lunes un minuto de silencio a las 22H31 precisas, hora en la que estalló la bomba. El tributo fue en la plaza Saint Ann, convertida en el centro del duelo, ya prácticamente cubierta de flores, globos, y sentidos mensajes a las víctimas y familiares.
La multitud coreó una canción de Oasis, grupo de la ciudad, titulada “Don’t Look Back In Anger” (“No mires atrás con ira”), convertida en el himno de Manchester desde el atentado.
Precisamente, este martes por la noche, quien fuera cantante de Oasis, Liam Gallagher, hará su debut en solitario en Manchester en un recital cuya recaudación será donada a las víctimas del atentado. “Quiero tratar de ayudar a la gente”, dijo el cantante de 44 años al diario Manchester Evening News.
Según avanza la investigación, el nivel de alerta terrorista en Reino Unido se redujo el sábado de “crítico”, máximo nivel, a “grave”, segundo, lo que significa que un atentado es “altamente probable”, pero no “inminente”.