La radioinmunoterapia da resultados positivos en la eliminación del VIH
Un equipo científico ha utilizado radioinmunoterapia para destruir los restos del virus de inmunodeficiencia humana que perviven dentro de las células humanas en muestras de sangre de pacientes tratados con terapia antirretroviral. El perfeccionamiento de esta técnica podría favorecer una nueva estrategia para curar la infección por VIH.
El equipo autor de la investigación, presentada en la reunión anual de la Sociedad Norteamericana de Radiología, ha aportado nuevos horizontes a la terapia antirretroviral altamente activa, pues aunque suprimía la replicación del virus en el cuerpo, no actuaba frente a ciertos depósitos de células con infección latente, que persistían evitando la posibilidad de una cura permanente.
La autora principal de este estudio, la profesora de Radiología, Microbiología e Inmunología en el Colegio de Medicina Albert Einstein College del Bronx, Ekaterina Dadachova, lo explicaba así: ‘En un paciente con VIH en terapia antirretroviral, los medicamentos suprimen la replicación viral, lo que significa que mantienen el número de partículas virales muy bajo en la sangre de un paciente. Sin embargo, la terapia antirretroviral no puede matar las células infectadas por el VIH’.
Cualquier estrategia para curar la infección por el VIH debe incluir un método para eliminar las células infectadas por el virus’
¿Cómo funciona?
En la radioinmunoterapia, tradicionalmente utilizada para tratar el cáncer, los anticuerpos se unen a las células infectadas y las matan por la radiación. Cuando se utilizan juntas la terapia antirretroviral y la radioinmunoterapia, destruyen el virus y las células infectadas, respectivamente.
Los investigadores encontraron que la radioinmunoterapia fue capaz de matar linfocitos infectados por el VIH tratados previamente con terapia antirretroviral, reduciendo la infección por el VIH en las muestras de sangre a niveles indetectables.
Una parte importante del estudio probó la capacidad del anticuerpo radiomarcado para llegar a las células infectadas por el VIH en el cerebro y el sistema nervioso central.
El tratamiento antirretroviral penetra sólo parcialmente la barrera hematoencefálica, lo que significa que incluso si un paciente está libre de VIH por vía sistémica, el virus es todavía capaz de propagarse en el cerebro, causando trastornos cognitivos y deterioro mental […] Nuestro estudio demostró que RIT es capaz de matar las células infectadas por el VIH tanto sistémicamente como en el sistema nervioso central’