Desmontan el monumento a Steve Jobs de la Universidad de San Petersburgo

La delirante -y no olvidemos, peligrosa- fijación de las autoridades rusas por todo lo que tenga que ver con la comunidad LGTB ha llegado a su punto más autoparódico, si en algún momento podemos descansar las comisuras de los labios de la mueca de horror que nos produce todos los atropellos a los que somete al colectivo en su territorio.

Si la semana pasada nos sorprendíamos de que existiese todavía alguien que no conociera que Tim Cook es homosexual, hoy os acercamos la reacción del grupo empresarial que financió el monumento homenaje a su antecesor en la ciudad sursa de San Petersburgo.

Escuchar a Steve Jobs te hace gay

Según ha trascendido a través de medios locales, una escultura en forma de iPhone de la voladura de 1.80 metros de longitud ha sido retirada para evitar que sea considerada un elemento de ‘propaganda homosexual’, como gusta denominar allí a la expresión libre de la condición LGTB.

Uno de los personajes involucrados en esta decisión es el diputado Vitali Milónov, que además solicitó que se le prohiba la entrada a Cook an la República Rusa. Y para quien le no suene, también es responsable de haber promovido la ley federal contra la propaganda homosexual, aprobada el año pasado.

El principal argumento de esta organización es que ‘defiende públicamente la sodomía”,- algo que no sabemos si hace a través de insinuaciones veladas en voz de Steve Jobs, o igual con la mirada, quien sabe-. No obstante, recomendamos que para mayor coherencia se deshagan también de todos los dispositivos de la marca. Quien sabe si se los pueden en contrar algún día avanzando sigilosamente por sus rectos.

Vídeo: Retirada del monumento a Steve Jobs

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