Mal diagnóstico de VIH se convierte en multa de 19 millones de euros para irresponsable doctor
Fue en 2007 cuando el hombre de 48 años, Sean Stentlford acudió a una clínica a realizarse un examen de VIH, ya que tenía claros síntomas realizados con esta enfermedad autoinmune.
Un jurado determino que un hombre recibiría una indemnización por poco más de 19 millones de euros después de que el doctor hiciera un mal diagnóstico de VIH, que más tarde se convirtió en SIDA.
Fue en 2007 cuando el hombre de 48 años, Sean Stentlford acudió a una clínica a realizarse un examen de VIH, ya que tenía claros síntomas realizados con esta enfermedad autoinmune.
Mientras que el neurólogo Kinan Hreib descartó que el hombre pudiera tener VIH, así que canceló la prueba sin siquiera decirle al hombre que temía por su vida.
Cuando Stentifor volvió al laboratorio para consultar sus resultados, el internista que se encargó de hacerle el examen aseguró que “todo lucía bien”. Así que convencido de no tener VIH regresó a casa.
Un mal diagnóstico de VIH tiene en riesgo la vida de este hombre
Tres años después de ese examen fallido, Sean visitó a otro doctor, quien le recomendó volver a realizar un examen de VIH; esta vez había arrojado resultados positivos pero con una noticias aún pero: ya se había convertido en SIDA.
El rápido avance de la enfermedad y el mal diagnóstico de VIH hicieron que el hombre desarrollara daño cerebral, así como fallas en el sistema cognitivo, lo que acabó de forma definitiva con su carrera como abogado.
“Tenía un futuro brillante frente a él, ellos literalmente le quitaron las piernas bajo sus ojos, Perdió su trabajo, su carrera y su vida”, dijo David Angueira, de acuerdo con Queerty al jurado.
Un juicio eterno por un mal diagnóstico de VIH
El caso llegó a los tribunales, y después de meses de llevar seguimiento al caso. En ocho días la Corte de Distrito de Estados Unidos determinó que el doctor Hreib había sido negligente al descuidar la salud de Stentiford, lo que más tarde le provocó una terrible lesión.
El pago por esta horrible negligencia médica ascendió a 19 millones de euros, sin embargo, la vida de Sean nunca volverá a ser la misma después del mal diagnóstico de VIH.