Únete al boom del café gourmet que puedes elaborar tú mismo
Las cafeterías están apostando por un método que cambiará radicalmente la forma en que consumes tu taza diaria de café.
Con el tiempo, se han hecho importantes aportaciones en el arte culinario; una de las más recientes es la extracción en frío del café. Al inicio de la década, baristas neoyorkinos comenzaron a preocuparse mucho más por los procesos orgánicos, la infusión en frío o cold brew es uno de ellos.
Fue Todd Simpson el pionero en el infusor de café. El ingeniero químico de la Universidad de Cornell se especializó en el estudio de los granos de café. Descubrió que cuando el agua está caliente y se mezcla con el café libera ácidos, ácidos grasos y otras sustancias no necesarias. Gracias a esta investigación se dedicó a inventar el dispositivo “Toddy”, un artefacto de plástico que logró extraer lo mejor y más saludable del café.
El “cold brew” o extracción en frío consiste en hacer una infusión prolongada con el café molido, se deja reposar un promedio de 12 a 24 horas a temperatura ambiente en agua fría; lo que resulta de este proceso es una forma totalmente nueva de distinguir la esencia y sabor del café. De acuerdo con una investigación del laboratorio “Toddy”, se encuentran de 3 a 4 veces más ácidos cuando el café se hace en cafetera.
¿Cómo prepararlo?
Existen dos formas de obtener esta infusión. La primera requiere aditamentos especiales como una Prensa francesa para café, un Sifón o Minispresso; estos artefactos utilizan la técnica de goteo para lograr la mezcla. Su precio puede variar de los 50 a los 150 euros.
Y si no quieres gastar, la segunda opción será la más viable, pues además te garantiza el mismo sabor. Lo único que tienes que hacer es seguir el método de inmersión, en la que el café molido permanece en contacto con el agua durante una noche o día completo; por último se filtra, ya sea con una rejilla especial o un filtro de cafetera.