La exposición más erótica de la fotógrafa Jessica Yatrofsky
Poco conocíamos de ella, pero definitivamente nos ha cautivado. Cuerpos etéreos, naturales, sin ningún tipo de artificio ni excesivamente musculados. Eróticos y sugerentes sin caer en el morbo común que domina en este tipo de publicaciones.
La fotógrafa Jessica Yatrofsky nos presenta I heart Boy un movimiento que pretende hacer visible el desnudo masculino y construirle un espacio en el mundo del arte.
Porque ellos también pueden ser sexuales mientras bostezan. Te enseñamos las mejores imágenes de esta obra capaz de mostrar la vanidad, inocencia o inseguridad de un hombre en ‘cueros’.
Posando en la intimidad de sus propios hogar, dejándose llevar; así es como la fotógrafa americana explica lo qué es la naturalidad del desnudo.
El lugar elegido para plasmarlo, los diáfanos apartamentos de Manhattan y el centro de Brooklyn. Allí estos cuerpos larguiruchos y sin pelo consiguen desatar sensualidad y timidez, a través del objetivo
En contra de los fondos minimalistas, de estudios futuristas y llenos de color, esta exposición es un claro reflejo de los espacios abiertos, de salas con luz natural, de pocos muebles.
No se necesita más que a la propia persona para plamarla íntegramente. ¿Contradicción o realidad?
Con una suavidad erótica y serena confianza, los jóvenes se descubren completamente desnudos. Para Yatrofsky, una manera de reflejar por completo el alma.
‘Las personas deben destilar un modo de ser y de estar, de mirar, de posar, de tocarse, esperar o hasta desesperarse… de seducir.’
Con guiños a Larry Clark y la escena de los años 80, la música underground, y las bandas indie más populares de Nueva York, Los Ángeles, Londres, París y Berlín, así es cómo se define la estética de esta Yatrofsky.
Hombres con toques cercanos a la androginia, algún tatuaje de vez en cuando y un poco de arrogancia del punk. Claro gusto por diseñadores como Hedi Slimane o American Apparel.
Modelos conocidos o no pero libres de escenografía. Antes de disparar, la fotógrafa espera el comienzo de la acción, mientras ellos miran al infinito, se acarician, bostezan, se muestran transparentes. A solas.
Ojos, boca, cuerpos a medio vestir o desnudos, enseñando el rostro, el torso o incluso las partes más íntimas. Gestos que sugieren historias, desvelan el pudor inicial o la osadía, descubren la incomodidad o admiración, mientras la cámara los va haciendo suyos.
Sin duda observar a sus personajes nos convierte en auténticos mirones.
Hablemos de ella, de la artista, la creadora, la cabeza de todo esto. Jennifer Yatrofsky es una popular fotógrafa, asentada en Nueva York y conocida por sus trabajos con hombres desnudos.
Nacida en Las Vegas, fue allí donde comenzó su carrera fotográfica plasmando la anatomía de los bailarines de streaptease, en los clubes de alterne.
Desde entonces exploró todo el mundo y manifestaciones del arte, basándose siempre en los cuerpos íntegros de las personas
En la actualidad Yatrofsky es una colaboradora habitual de EastVillageBoys.com y fundadora de iheartboy.com, un sitio web dedicado a imaginarse a los jóvenes de manera provocativa.
Entre sus obras de arte, destacan proyectos de performance en los que el público se enfrenta a la desnudez y a la política sexual, y videos que exploran la belleza, la indefensa y la percepción.
Gracias a sus trabajos, Yatrofsky recibió un importante galardón, el MFA de la Escuela Superior de Diseño.
Naturalmente, ella no es la única en usar este método tan efectivo y sugerente para desnudar al modelo o mostrarlo de forma más natural.
No es la única en dejar al objeto fotografiado en manos del que mira, indefenso, sin la posibilidad de usar la palabra; a la espera de órdenes, en suspenso… En realidad, es un clásico. Hay muchas versiones, incluso con música.
Una de las grabaciones recientes, es la del grupo R.E.M. La actriz Kirsten Dunst y el poeta John Giorno callaron ante la cámara para ilustrar la canción We All Go Back to Where We Belong. Juventud y vejez, sensualidad y ternura, experiencia o ingenuidad
Con cada fotografía, estas imágenes sexualmente cargadas de cuerpos masculinos, invitan al espectador a ‘insistir en la ternura de la piel caliente‘.
Una serie de desnudos en el sentido más puro de ser; simplemente como un ser humano desnudo ante el mundo. Eso es I heart Boy.